La medicina interna es una especialidad médica que atiende de forma integral los problemas de salud en pacientes adultos, ingresados en un centro hospitalario o en consultas ambulatorias.
Entre sus competencias, está guiar al enfermo en su compleja trayectoria por el sistema sanitario hospitalario, dirigiendo y coordinando la actuación frente a la enfermedad y coordinando al resto de especialistas necesarios para obtener un diagnóstico y tratamiento adecuados.
Los médicos internistas son los expertos a quienes recurren los médicos de atención primaria y el resto de especialistas para atender a enfermos complejos, cuyo diagnóstico es difícil, y quienes podrían estar afectados por varias enfermedades o que presentan síntomas en varios órganos, aparatos o sistemas del organismo.
La extensa formación de los internistas no evita, sin embargo, que requieran expertos en el control de los factores de riesgo cardiovascular, enfermedades infecciosas y muy especialmente el VIH, la insuficiencia cardiaca congestiva, la enfermeda tromboembólica venosa y todas las enfermedades reumatológicas y autoinmunes.