Caribes de Anzoátegui celebra aún la consecución de su tercera corona de la LVBP pero desde las oficinas el trabajo no se detiene a fin de tener la mejor nómina posible para la Serie del Caribe. Su rival en la final, Cardenales de Lara, será el único proveedor de talento para el venidero evento internacional tras anunciarse como refuerzos a los lanzadores Néstor Molina, Felipe Paulino, César Jiménez y Ricardo Gómez.
La «Tribu», que el pasado sábado se llevó los máximos honores de la campaña al vencer a los crepusculares por global de 4-2 en la instancia decisiva, dieron a conocer a través de su cuenta oficial en twitter los nombres de los cuatro peloteros que blindarán su plantilla de cara al venidero clásico caribeño, a disputarse del 2 al 8 de febrero en Jalisco, México.
Molina y Jiménez podrían fungir como iniciadores pero solo el primero estaría como ficha segura dentro de una rotación para el manager Omar López que, salvo algún contratiempo de última hora, estaría integrada también por Daryl Thompson, Freddy García y Carlos Teller.
Molina fue uno de los brazos más consistentes de los «Pájaros Rojos» en toda la temporada al punto de conseguir siete ganancias en la eliminatoria. En la final se fue sin decisión en su única apertura con trabajo de 4.2 actos en los que cedió cinco hits con tres boletos e igual cantidad de abanicados.
Jiménez por su parte fue tomado para trabajar en los innings intermedios o en caso de una mala salida de los abridores. En la última fase del torneo se vio bien con labor inmaculada de 3.2 episodios.
Paulino y Gómez se montarán en el avión a tierras aztecas con la misión de ayudar en los capítulos finales de los encuentros dada la conocida ausencia del cerrador habitual de Caribes Nick Struck, quien no podrá acompañarlos por condiciones del evento al ser reserva ya de un equipo de otra liga del Caribe (Venados de Mazatlán).
Se pudo conocer que Dustin Antolin y Pedro Rodríguez habrían sido otros de los nombres que estuvieron en la agenda de la gerencia para ser contactados.
