En opinión de Manuel Isidro Molina, presidente del Movimiento Popular Alternativo, MPA, la reciente declaración del presidente de Colombia Gustavo Petro, sobre el contrabando fronterizo masivo entre nuestro vecino neogranadino y Venezuela, demuestra que Colombia es el reino de las mafias, mientras que la corrupción de la burocracia civil y militar campea en Venezuela.
El dirigente aseguró que el gobierno de Petro debe comenzar por reconocer la real dimensión de las poderosas, profundas y extendidas mafias que han enraizado en Colombia. A lo que añadió que, en el caso de Venezuela, “estamos ante el corrupto, inepto y abusador gobierno de Maduro/PSUV que no está en condiciones de garantizar transparencia y eficiencia en los intercambios comerciales con ningún país del mundo”.
Señaló que Colombia acaba de romper su propio récord de siembra de coca, y sigue siendo el mayor exportador de cocaína del mundo, según la ONU. Situación que a su juicio permite que narco mafias controlen a sangre y fuego actividades como la prostitución, contrabando, falsificación de dólares, juegos ilegales, apuestas, sicariato, exportación de mercenarios y tráfico de órganos humanos. Es decir un sinfín de actividades ilícitas, todas bañadas de corrupción y violencia coactiva.
Por otra parte, aseguró el máximo dirigente del MPA que la posibilidad de legalización de la cocaína, la marihuana y otras drogas destructivas en Colombia, constituye una seria amenaza para Venezuela y los demás países fronterizos con el territorio colombiano.
Subrayó que este tema debería formar parte de la agenda binacional, algo que hasta la fecha no ha ocurrido, de acuerdo a la información que maneja.
Advirtió que Venezuela carece de fortalezas e idónea representatividad en la Presidencia de la República y la cancillería, para atender esta problemática, lo que desde su perspectiva, nos pone una vez más, con una enorme desventaja en el plano internacional.
“Tiene razón Petro al levantar su voz contra el contrabando en el intercambio binacional, pero la realidad es que las mafias han enervado a Colombia, y en Venezuela la pudrición apesta, por lo que solo con un cambio verdadero como el que proponemos, se podrá normalizar las relaciones de intercambio internacional, para bien de nuestros pueblos”, sentenció.
Hizo un llamado a la población a sumarse al cambio verdadero desde el orden ético y moral hasta las estructuras desmembradas del Estado, con el objetivo de afrontar el proceso en marcha por la reconstrucción integral de Venezuela.
Con nota de prensa
