El entrenador del Roma, el portugués José Mourinho, no se ve todavía en cuartos de final de la Liga Europa, pese al 2-0 que le endosó la pasada semana a la Real Sociedad, un resultado que «no es definitivo», aunque le concede más opciones.
«En la teoría estamos preparados para sacar ventaja de una situación emocional para ellos tras un resultado, el de la ida, que no es definitivo, pero que sí es negativo para la Real», reflexionó en San Sebastián el técnico del conjunto italiano.
«La Real jugó bien allí, sin Brais Méndez, que es una señal de querer cambiar un poco la filosofía habitual, pero ahora intentarán ser más agresivos, corriendo riesgos que les pueden ayudar a remontar o que el partido termine antes», anticipó el técnico del Roma.
No teme el ambiente que se espera este jueves en el Reale Arena de San Sebastián en una cita que desde el entorno realista se califica de histórica y que puede ser un extra a favor del intento de la Real de voltear esta eliminatoria.
«Espero un gran apoyo de la grada a la Real pero para nosotros un desastre era jugar por la COVID-19 en estadios vacíos, mientras que ahora espera un estadio fantástico, muy bello, con buen césped y es bueno para nosotros que sea una tempestad», dijo un José Mourinho que no reservará nada para el derbi del domingo en la Serie A ante Lazio.
«Mi pensamiento está en que el próximo partido siempre es el más importante y no pienso en el encuentro del domingo porque el importante es el de mañana y pondré el once con más garantías para pasar a los cuartos de final», sentenció el preparador luso.
