El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no entró en el Despacho Oval el martes, un día después de redibir el alta del hospital donde se trataba de COVID-19, aseguró un portavoz de la Casa Blanca, lo que contradijo a un consejero del mandatario.
El comportamiento del presidente está bajo especial atención y análisis de la opinión pública y los medios de comunicación, ya que una gran cantidad de personas que trabajan en la Casa Blanca, incluidos periodistas, han dado positivo por coronavirus.
«El presidente quería estar en el Despacho Oval ayer (martes), pero no lo estuvo y trabajó desde la residencia», tuiteó Ben Williamson, portavoz del presidente.
Continúan las contradicciones
Unos minutos antes, su asesor económico, Larry Kudlow, había dicho en el canal CNBC que Trump había «aparecido ayer (martes) en el Despacho Oval tomando las máximas precauciones respecto al COVID-19».
La Casa Blanca informó que prepara un operativo para permitir que el presidente regrese a su despacho en los próximos días.
Poco antes de su salida el lunes del hospital militar Walter Reed, los médicos de Trump recalcaron que «todavía no estaba completamente fuera de peligro».
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