Un palestino de 13 años murió hoy y decenas resultaron heridos por disparos del Ejército israelí en nuevas protestas en Gaza junto a la valla de separación con Israel, donde se produjeron choques con los soldados que dispersaron con gases lacrimógenos y munición real.
«Un palestino de 13 años murió de un disparo en el área de Jan Yunes, sin más detalles sobre su identificación», informó el Ministerio de Sanidad del enclave costero.
Según esta misma fuente, al menos 134 personas resultaron heridas, la mitad de ellos por arma de fuego del Ejército israelí y el resto por inhalación de gases lacrimógenos, entre ellos, un paramédico.
Testigos dijeron a Efe que grupos de palestinos quemaron ruedas e intentaron cortar la valla de seguridad, mientras que otros lanzaron cometas y balones incendiarios hacia Israel.
El Ejército apostado en colinas, en la parte israelí, utilizó medios de dispersión masiva como gases lacrimógenos lanzados desde drones, además de munición real.
La conocida como Gran Marcha del Retorno, que reclama el derecho de los refugiados a volver a sus lugares de origen, fue convocada hoy también contra el «acuerdo de paz» que prepara la Administración estadounidense de Donald Trump, cuya delegación negociadora estuvo en la región hace una semana sin reunirse con los palestinos que lo rechazan como mediador.
La movilización comenzó el pasado 30 de marzo, apoyada por sectores políticos y sociales, y desde entonces se han registrado manifestaciones masivas cada viernes en la frontera, aunque ha descendido el número de participantes, desde los 40.000 del primer día hasta los centenares congregados hoy.
Israel considera que el movimiento islamista Hamás, que controla el enclave costero desde 2007, utiliza estas protestas para entrar en territorio israelí y cometer atentados.
El portavoz de Hamás en Gaza, Abdulatif Al Qanoua, aseguró hoy que las marchas continuarán hasta que se levante el bloqueo impuesto en la Franja de Gaza.
Desde que comenzaran las protestas, 134 palestinos han muerto, la mayoría en manifestaciones además de en incidentes violentos en la frontera, y 14.000 han resultado heridos, la mitad por munición real, según el Ministerio de Sanidad.
