Tres inmigrantes haitianos, entre ellos una mujer embarazada, murieron en un incendio que destruyó la casa que habitaban en Santiago de Chile, según informaron fuentes policiales y los bomberos.
El fuego, cuyas causas se investigan, estalló a las 04.30 horas locales (07.30 GMT) en una vivienda situada en la población Robert Kennedy, en el municipio de Estación Central, y los fallecidos son la mujer, que presentaba un embarazo de ocho meses, su marido y un primo, precisaron las fuentes.
Otra mujer, también haitiana, fue ingresada en un centro asistencial con quemaduras en el 70 por ciento de su cuerpo y se encuentra con riesgo vital.
Las víctimas no pudieron salir de la habitación en que dormían, cuyos accesos contaban con rejas de protección, dijo a los periodistas el teniente de Bomberos Felipe Calderón.
Explicó que la casa afectada tenía dos secciones y que el fuego comenzó en la parte delantera, en la que vivían tres parejas, mientras en la parte posterior vivían otras cuatro personas que lograron salvarse.
En Chile, según datos gubernamentales, viven unos 180.000 haitianos, en una población inmigrante de 1.090.000 personas en la que predominan las de origen venezolano y peruano.
Este miércoles, un total de 160 haitianos regresaron a su país en el primer vuelo enmarcado en un «Plan Humanitario de Retorno Ordenado» implementado por el Gobierno chileno para inmigrantes de ese país que de forma voluntaria opten por el retorno.
Problemas con el idioma, las dificultades para encontrar empleo o viviendas adecuadas, las actitudes racistas o xenófobas de algunos chilenos, la separación familiar y hasta no poder soportar el frío clima del país austral son algunas de las causas esgrimidas por quienes eligieron el regreso.
En el plan se han inscrito hasta ahora 1.087 personas, según las autoridades, y en principio se informó que 176 serían los ocupantes del primer vuelo, pero se informó primero que uno se había arrepentido para no abandonar a su novia y durante la tarde se precisó que fueron 16 los que faltaron a la cita. EFE
