Al menos una persona murió, varias resultaron heridas y una mujer terminó secuestrada después de que un grupo de hombres fuertemente armados atacara una iglesia protestante en Puerto Príncipe durante un servicio religioso este domingo.
El diácono de la iglesia Sylner Lafaille resultó muerto y su esposa, secuestrada, destacaron medios locales en la capital haitiana.
El comando sembró el terror este domingo en la Primera Iglesia Bautista de Puerto Príncipe cuando celebraba su primer servicio. El templo se encuentra a pocos kilómetros del Palacio Nacional.
No es el primer lugar de culto que es atacado por bandas armadas que actúan impunemente. En abril pasado, un pastor y tres de sus seguidores fueron secuestrados en medio de un servicio que se transmitía en directo en las redes sociales.
Nadie está a salvo
En sus casas, en las iglesias, en las escuelas y en las calles, los haitianos no están a salvo de los robos, abusos y secuestros que azotan el país desde finales de 2019.
Más de una docena de personas resultaron secuestradas en la región de Puerto Príncipe por bandidos armados que mantienen la zona como rehén desde hace varios meses.
Según la Fundación Je Klere, al menos 150 grupos armados controlan el país, mientras que la Policía luce impotente para imponer el orden.
El país caribeño atraviesa una grave crisis en prácticamente todos los órdenes, agravada por el asesinato del presidente Jovenel Moise, el 7 de julio pasado y el terremoto del 14 de agosto en la región sur, que causó más de 2 mil muertes y destruyó decenas de miles de viviendas.EFE