La española Garbiñe Muguruza, defensora del título, se despidió de Roland Garros este domingo al caer ante la francesa Kristina Mladenovic y en rueda de prensa lamentó entre lágrimas la falta de respeto del público, que se volcó con la jugadora local.
Muguruza cedió en tres sets, por 6-1, 3-6 y 6-3, en una hora y 59 minutos.
Cuando recibió el aplauso del público a su salida de la pista Suzanne Lenglen la jugadora nacida en Caracas hizo un gesto de negación con el dedo.
En rueda de prensa explicó en inglés lo que vivió: "Fue duro para mí ver lo que ocurría con la multitud. Creo que a veces tenían que haber sido más respetuosos, sobre todo en el juego. No me gusta crear enemigos, pero fue duro estar en la cancha hoy".
Luego le preguntaron qué le parecía que Mladenovic gritara 'Forza' cuando ella cometía errores no forzados. Entonces bajó la cabeza y comenzó a llorar. Tuvo que salir de la sala unos instantes para tranquilizarse.
"Creo que habla 25 lenguas, la escuché...", respondió a continuación Muguruza, ironizando sobre los diferentes idiomas que habla su rival y dejando claro que le molestó su conducta antideportiva.
"El ambiente me recordó a la Copa Federación. Me gusta jugar Roland Garros y fue chocante ver que era más como la Copa Confederación. Aprenderé a hacer oídos sordos", añadió en español, sin querer extenderse más sobre el apoyo del público a Mladenovic.
'Un alivio' -
En la cancha Mladenovic, de 24 años y 14ª mundial, alcanzó por primera vez los cuartos en París. Jugará contra la suiza Timea Bacsinszky, que venció a la estadounidense Venus Williams.
"Ustedes me hacen llorar. Era un partido de octavos contra la vigente campeona y esperaba un enorme duelo. Siempre había jugado en la Suzanne Lenglen llena, pero estaba vez estaba muy muy llena", dijo Mladenovic en la pista.
"Es un gran regalo para mí jugar ante ustedes, he luchado como he podido. Pero me dieron coraje y estoy en cuartos", añadió.
Mladenovic es la primera francesa en cuartos de Roland Garros desde Marion Bartoli en 2011.
Ante Muguruza, acertó con imponentes golpes ganadores desde el fondo de la pista, en un partido espectacular pero con muchos errores, la mayor parte de la española, para ganar en una hora y 59 minutos.
"Es un poco un alivio que termine Roland Garros para mí, así todos dejarán de preguntarme. Es una parte de mi carrera que se cierra, venir aquí y defender el título", dijo Muguruza.
"Hoy no saldré a comer un helado, pero no voy a hacer un drama", añadió antes de levantarse.