Este viernes Naguanagua cumple 239 años de haber sido elevada a parroquia eclesiástica. La celebración se da en medio de quejas de los habitantes de ese municipio, por los malos servicios que recibe y por los cobros excesivos de impuestos.
Muchos sectores son víctimas a diario de interrupciones del servicio eléctricode prolongada duración, en detrimento de la calidad de vida de los vecinos. Lo mismo ocurre con el agua, pues muchas comunidades, sobre todo las de la parte alta, tienen años reclamando para que les llegue el suministro.
Incluso en medio de la pandemia, vecinos han reclamado que no se le hace mantenimiento a las bombas lo que trae como consecuencia que se dañen y, por supuesto, quedan inoperativas.
Realmente del servicio del aseo son muy pocas las quejas que ha habido en los últimos días. Sin embargo ahora estas se centran en los altos montos que se establecieron por concepto de pago de este servicio.
Comerciantes aseguran que el pago del aseo urbano tuvo un incremento de un 300 por ciento. Y que el alcalde no ha tomado en cuenta que la mayoría solo trabaja dos semanas al mes, para cumplir con el esquema 7+7 que se estableció en medio de la pandemia.
EN PANDEMIA
Por segundo año consecutivo Naguanagua celebra su elevación a parroquia eclesiástica en medio de la pandemia por COVID-19. No obstante esta vez no será igual que el año pasado, pues se programó una sesión especial presencial en la plaza Bolívar para festejar la fecha.
El orador es Armando Alcántara, cronista de la ciudad.
HISTORIA
Los documentos y registros de la época colonial indican que la zona que hoy se conoce como Naguanagua estuvo poblada comunidades indígenas de las étnicas Caribe y Arawac.
En el siglo XVI, el dominio de dichos poblados indígenas los ejercía el cacique Nagoanagoa, hasta el descubrimiento del Lago de Valencia en 1547 por los colonizadores españoles.
Posteriormente, a finales del siglo del siglo XVII un grupo de vecinos allí asentados, encabezados por Don Bernardino López y Don Dionisio Matute, solicitaron al gobierno eclesiástico de la época la conformación de un curato para satisfacer sus necesidades espirituales.
Esto conllevó a que monseñor Don Mariano Martí, obispo de la Provincia de Venezuela firmara el 14 de mayo de 1782 un decreto que dio nacimiento a la parroquia eclesiástica bajo la advocación de Nuestra Señora de Begoña. La demarcación para la iglesia, la plaza y el cementerio de la parroquia se realizó el 21 de enero de 1783.
En 1810 la parroquia pasa a formar parte del Cantón Valencia en calidad de pueblo. Esta unión se mantuvo inalterable hasta 1994, cuando el gobernador de entonces Henrique Salas Römer le pone el ejecútese a la Ley de División Político Territorial, que le da la autonomía municipal a Naguanagua.
Dilia Sayago de Moreno fue la primera alcaldesa de Naguanagua, le siguió Julio Castillo, quien fue reelecto en el cargo. Posteriormente fue elegido Alejandro Feo La Cruz y después Gustavo Gutiérrez, quien está ahora frente a la alcaldía.
CRECIMIENTO
Solo la pandemia ha detenido el crecimiento de este municipio ubicado al norte de Valencia, que tiene grandes centros comerciales, los mejores hoteles, la ciudad universitaria, las aguas termales más famosas del mundo, el jardín botánico y el cerro El Café, entre otras atracciones.
Cuenta además con tres hospitales públicos, varios CDI y ambulatorios disponibles para la población. Aunque la queja por la falta de agua incluye a los hospitales.
La mayor actividad en este municipio se da en el área universitaria, pues miles de estudiantes se concentran allí para recibir su formación. Sin embargo por efectos de la pandemia, todo esto se paralizó y la casa de estudios superiores del estado, ha sido cometida a múltiples robos que limitan en lo adelante su buen funcionamiento.
