El defensor de los derechos humanos, Rafael Narváez se pronunció sobre el nuevo intento en reanudar diálogo entre el gobierno y la oposición y manifestó la necesidad de establecer una agenda con soluciones para detener la hiperinflación en el país.
Exigió un diálogo sincero sin color político dónde prevalezca la prioridad en atender a un pueblo paciente, noble pero que sufre día a día sin ver soluciones para sobrevivir.
Citó que la hiperinflación fue lo que acabó con el salario y amenaza con destruir también el valor del dólar.
Narváez pide reactivar el programa de trasplante de órganos para detener las muertes de niños en el Hospital JM de los Ríos.
Sostiene que Venezuela requiere de un sistema de salud pública eficiente, para salvar vidas y no caer en las manos de las clínicas privadas cuyos costos son inalcansable para los menos pudientes.
Apuntó que es necesario exigir a los países receptores de migrantes venezolanos, cesar en el maltrato, desprecio, xenofobia y deportación.
El coordinador por los derechos civiles expresó que el Estado solo le importa acumular más poder político sin importarle las violaciones graves de los derechos humanos y garantías constitucionales, el pueblo sigue indefenso sin tener dolientes.
Con nota de prensa