Ocho policías adscritos al Departamento de Protección y Emergencia y Grupo Operativo Interagencial de Trinidad y Tobago, fueron acusados este martes por el asesinato de tres hombres en 2020, informaron fuentes policiales.
La Oficina del Director de la Fiscalía Pública trinitense decidió acusar a estos ocho oficiales, entre ellos un sargento, por asesinar a Israel Moses Clinton, de 27 años; Joel Jacob, de 38, y Noel Diamond, de 46, en hechos ocurridos en Morvant, en las afueras de Puerto España.
El comisionado de la Policía trinitense, Mc Donald Jacob, confirmó este martes en un programa de radio, que los ocho oficiales, quienes fueron detenidos el pasado fin de semana, han sido acusados de asesinato.
Por su parte, Ulric Skerritt, uno de los abogados de defensa de los policías, aseguró que estos enfrentarán la Justicia «y serán exonerados» de los cargos.
«Ellos solo hicieron su trabajo», indicó.
Ocho policías son acusados
Fue el 27 de junio de 2020, cuando 18 policías asignados al Departamento de Protección y Emergencia y Grupo Operativo Interagencial de Trinidad y Tobago interceptaron un vehículo en el que viajaban los tres hombres asesinados.
Al detener el vehículo, Jacob, quien viajaba en el asiento posterior junto a su amigo de la infancia, Diamond, levantaron sus manos.
Clinton, quien manejaba el vehículo, mantuvo sus manos en el volante mientras los policías custodiaban el automóvil al mismo tiempo que apuntaban sus armas automáticas a los tres hombres, a quienes posteriormente asesinaron a quemarropa.
Luego de que los tres hombres fueran baleados, los oficiales involucrados en el incidente envolvieron los cuerpos en la parte posterior de su camioneta y se marcharon a toda prisa, mientras que otros policías apuntaban con sus armas a residentes de la zona mientras observaban la escena.
El tiroteo fue grabado por cámaras de seguridad del área y posteriormente compartidas en las redes sociales horas después.
La matanza de los tres hombres provocó durante tres días una serie de protestas en la capital trinitense y otras partes del país caribeño.
Por su parte, el primer ministro de Trinidad y Tobago, Keith Rowley, designó un comité especial para investigar las razones de las protestas.