El oficialismo de Ecuador recordó este miércoles con una multitudinaria manifestación, el «feriado bancario», episodio central de la crisis financiera de 1999 con el que relaciona al candidato opositor a la Presidencia del país, Guillermo Lasso, quien niega cualquier vinculación con aquellos sucesos.
Con gritos de «fuera Lasso, fuera», banderas del movimiento oficialista Alianza País (izquierda) y carteles de rechazo al opositor, varios miles de manifestantes recorrieron calles de Quito haciendo sonar bocinas y silbatos como expresión de su repudio al aspirante, exbanquero y líder del movimiento CREO (centro derecha).
La concentración se desarrolló en ambiente electoral, pues Lasso se medirá el dos de abril al candidato de AP, Lenín Moreno, en la segunda vuelta de los comicios presidenciales, cuya campaña proselitista comenzará este viernes.
La manifestación fue convocada para recordar la fecha del 8 de marzo de 1999, cuando estalló el «feriado bancario» en el contexto de la mayor crisis financiera del país, que conmocionó a Ecuador y motivó la emigración de miles de ciudadanos a países como EE.UU., España e Italia.
Lasso asegura que no intervino en las decisiones que se tomaron en la época, cuando fue ministro de Economía durante el Gobierno de Jamil Mahuad (1998-2000) y que fue exonerado de responsabilidad por la Comisión de Investigación de Delitos Financieros.
«Aquí están estas manos limpias. En estas manos no se ha perdido un centavo de ningún ecuatoriano», dijo en una entrevista con Efe en la que comentó que el Banco de Guayaquil, que administraba en aquel momento, «salió adelante sin un centavo del Estado».
Advirtió que se reserva acciones legales contra los «funcionarios correístas» (en referencia al presidente, Rafael Correa) que han tratado de ofender su honra y la de su familia con esas acusaciones, que consideró parte de una «campaña sucia» porque «ven que les vamos a ganar las elecciones».
