El estado Lara tuvo un repunte de casi el 20% de aumento en muertes para los pacientes renales, al registrar 215 decesos en 2020. Se trata de víctimas ahogadas por la crisis económica y la pandemia.
Douglas Morales, presidente de la fundación «SOS Pacientes renales», confirma este registro de 922 pacientes censados el año pasado en la región, reseñó La Prensa de Lara.
Todo tan lamentable por la dificultad que tienen para cumplir la dosificación indicada, tanto para la insuficiencia renal, como para la diabetes, hipertensión arterial y otras, resaltó Morales.
La crisis les cobró la vida
Añade que los pacientes pagaron con su vida al tener que suspender la insulina por varios meses, por solamente comprar el blíster con la decena de unidades, cuando se trata de una indicación diaria, debido a la crisis económica.
Por otra parte, ante la encrucijada de fijar la prioridad entre comprar alimentos o fármacos, se escucha el llamado del apoyo consecuente del Estado, para facilitar estos medicamentos de alto costo. «No están llegando al seguro y tampoco los pueden suministrar desde Sanidad», denuncia Maritza Escalona, paciente.
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