Pacientes renales adscritos al Centro de Diálisis Valencia Sur, manifestaron este jueves su malestar porque varias máquinas han quedado inoperativas por falta de agua, lo cual perjudica en gran medida su salud.

Los pacientes no trancaron calles, ni salieron a protestar en forma violenta, solo llamaron a los medios de comunicación social para que a través de ellos el pueblo se entere de las calamidades por la que están pasando. Piden solución al Instituto Venezolano de los Seguros Sociales.

Avis Córdova señaló que el problema de la falta de agua viene afectando al centro desde diciembre del año pasado. Esto ha traído como consecuencia que seis de las 20 máquinas con las que cuenta el centro, hayan quedado fuera de servicio.

Explicó que en el centro se deben atender 120 pacientes. 20

por turno, pero como sólo hay 14 máquinas disponibles, queda un remanente diario de más de 10 personas. La condición renal les exige estar conectado a la máquina de tres a cuatro horas diarias, tres veces a la semana, pero por la falta de agua este período se les acorta. Al no recibir el tratamiento adecuado, el cuerpo retiene líquidos, aumentan de peso y se les genera problemas respiratorios.

«Deben tomar en cuenta que somos pacientes de alto riesgo, que por cualquier cosa nos descompensamos».

Según dijo, a este centro acuden pacientes renales de Valencia, pero también de Bejuma, Libertador y hasta del estado Cojedes.

José Luis Alessandro señaló que en diciembre pasado los pacientes tuvieron que protestar porque las máquinas tenían cinco años sin que se les cambiaran los filtros. Con la protesta se logró que se le cambiaran a 15.

Ahora exigen que se les suministre de suficiente agua para que los equipos puedan funcionar a cabalidad y ellos puedan conservar su vida.

Según Alessandro el centro requiere de 40 mil litros de agua diario. Recientemente hablaron con el gobernador y les envió un cisterna, el centro adquirió otro, pero sigue siendo insuficiente para la actividad diaria que allí se realiza.

«Queremos que representantes del IVSS se apersonen para que constaten lo que está sucediendo aquí».

Yonder Oviedo afirmó que los pacientes requieren medicamentos como ácido fólico, hierro y calcio, pero estos les llegan en pocas cantidades por lo que no pueden recibir el tratamiento completo. A ellos les resulta difícil comprarlos por los altos precios.

Familiares de pacientes renales aseguraron que una buena cantidad de desechos hospitalarios se mantienen almacenados desde hace dos meses en el centro, motivado a que la empresa encargada de recogerlos no lo hace por falta de pago.

Se intentó conocer la posición de los directivos del centro, pero no fue posible, no estaban presentes.

 




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