Foto: @Palmeiras

El brasileño Palmeiras firmó este jueves un valioso triunfo por 2-0 en cancha de Colo Colo de Chile, en un intenso duelo de ida de cuartos de final de Copa Libertadores, que dejó al ‘verdao’ a las puertas de las semifinales.

Bruno Henrique y Dudu anotaron los tantos de Palmeiras a los 2 y 78 minutos, respectivamente.

Colo Colo sufrió la expulsión por roja directa a Damián Pérez en los descuentos.

Los dirigidos por Luiz Felipe Scolari apretaron el acelerador en el arranque y fulminaron con su gol inicial a un equipo chileno que mejoró en el complemento, pero que careció de poder ofensivo para igualar el marcador.

Enfrente, Palmeiras mostró su superioridad y, de contragolpe, definió el choque.

– Vertiginoso arranque –

Palmeiras le robó el protagonismo al local en el arranque, lo ahogó en su área y tuvo recompensa.

Abrumada por la dinámica de los brasileños en ataque, la defensa de Colo Colo entregó el balón, falló en un despeje y Moises habilitó a Bruno Henrique que, sin marcas, remató preciso para abrir el marcador.

El gol golpeó a los hinchas que colmaron el Monumental de Santiago y a la táctica de Héctor Tapia, sorprendido por la ventaja inicial de los de Felipao.

Con el pasaje de los minutos, el ‘popular’ chileno se sacudió de un arranque para el olvido, buscó poner en juego al veterano Jorge Valdivia y lanzar por la derecha a Óscar Opazo. Sin grandes luces pero con gran esfuerzo, el albo logró llevar el juego a campo de Palmeiras.

La posesión del balón pasó por momentos a los pies del local, pero las acciones de peligro fueron casi todas para un solvente equipo brasileño que reafirmó su capacidad para el contraataque y el control defensivo.

Remates de Dudu y Moises encontraron bien ubicado al argentino Agustín Orión, que disipó el peligro de su arco.

Toques aislados de Valdivia, que en su pasaje por Palmeiras se ganó el amor de la hinchada, y un cobro de pelota quieta de Esteban Paredes, que obligó al arquero Weverton a entregar un rebote peligroso desperdiciado por Julio Barroso, le dieron a los locales algún motivo para soñar con la remontada.

Enfrente, los de Felipao -campeón del mundo con la selección ‘canarinha’ en 2002- se fueron al descanso con un 1-0 en el bolsillo, una superlativa actuación de Bruno Henrique, y la seguridad de que la presión estaría como nunca del lado chileno en la segunda mitad.

– Contraataque, divino tesoro-

Colo Colo salió a jugar el complemento con máxima urgencia. Despierto y lanzado en ataque, el equipo chileno -que volvió a los cuartos de final de Libertadores tras más de dos décadas de ausencia- puso a la defensiva al ‘verdao`.

A los 51, Paredes se desplomó en el área, pero el árbitro uruguayo Andrés Cunha desestimó cobrar penal. Dos minutos después, Cunha volvió a ser protagonista cuando decidió usar el VAR (videoarbitraje) para decidir si un jugador de Palmeiras había desviado la pelota con su mano.

Pero el estreno del VAR en canchas chilenas favoreció a los brasileños, el árbitro desestimó cobrar mano y el 1-0 se mantuvo inmóvil.

Colo Colo mantuvo la presión y Scolari movió el banco: sacó a Miguel Borja, que pasó sin pena ni gloria por el encuentro, para dar ingreso a Jean a los 18 minutos. Un cambio con sabor defensivo que confirmó que el ‘verdao’ buscaba defender su gol.

Con la visita acorralada, Lucas Barrios -el delantero paraguayo que al igual que Valdivia vistió los colores de Palmeiras- sacó un cabezazo que pasó a centímetros del arco defendido por Weverton.

Las urgencias del Cacique en ataque desnudaron su retaguardia, Dudu estuvo a las puertas del gol en dos oportunidades, pero falló.

– A la de tres –

La tercera fue la vencida y, aprovechando un contraataque y un rebote en el palo, Dudu anotó el 2-0 y bajó el telón del partido.

El VAR volvió a aparecer cuando se jugaban los descuentos y sacó a Pérez del partido por una dura entrada a un jugador brasileño que le valió la tarjeta roja.

Sin su estrella Felipe Melo, expulsado en la ronda anterior, los brasileños se llevaron un 2-0 de oro de cara a su pasaje a semis.

La revancha se jugará el 3 de octubre en suelo brasileño. En semifinales, el ganador del cruce medirá fuerzas con Boca Juniors o Cruzeiro, duelo que en la ida en Buenos Aires terminó con un claro 2-0 a favor de los argentinos.




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