El Gobierno de Paraguay convocó este viernes al embajador de Washington en Asunción, Marc Ostfield, para que explique la decisión de Estados Unidos de incluir al vicepresidente paraguayo, Hugo Velázquez, y al expresidente Horacio Cartes (2013-2018) en su lista de corruptos, anuncio que crispó el ambiente político en el país.
El Ministerio de Relaciones Exteriores informó escuetamente en su cuenta de Twitter que el canciller, Julio César Arriola, convocó al delegado estadounidense “para solicitar datos sobre las designaciones realizadas por el secretario Antony J. Blinken, respecto a la supuesta participación de ciudadanos paraguayos en actos de corrupción significativa”.
Por su parte, Ostfield confirmó en la misma red social que sostuvo una “cordial reunión” con el jefe de la diplomacia paraguaya en la sede de la Cancillería en Asunción y defendió la decisión de su país.
“Corrupción significativa”
“Le aseguré que las designaciones sobre corrupción significativa no son políticas, sino que EE.UU. ejerce su derecho de decidir quién es elegible para ingresar a su territorio”, publicó el embajador en Twitter.
El diplomático reiteró que continuarán trabajando con el presidente paraguayo, Mario Abdo Benítez, “en áreas de interés mutuo para el beneficio de ambos países”.
Además, ratificó que seguirán usando “todas las herramientas disponibles para combatir la corrupción”, y aclaró que “la decisión de utilizarlas está determinada únicamente por la evidencia y las autoridades legales” de su país.
Horas antes, Abdo Benítez dijo a periodistas que había dado instrucciones a su canciller para que solicitara información respecto a las designaciones, aunque dijo que respeta las “decisiones soberanas de otros países”.
Soborno
El pasado 12 de agosto, Estados Unidos incluyó a Velázquez y a Juan Carlos Duarte, ahora exasesor jurídico de la entidad binacional Yacyretá (EBY), en su lista de personas corruptas.
Ostfield indicó entonces en una rueda de prensa en la capital paraguaya que Duarte, a pedido del vicepresidente Velázquez, “ofreció un soborno de más de un millón de dólares” a un funcionario público, con la presunta intención de “obstruir una investigación que amenazaba al vicepresidente y sus intereses financieros”.
El anuncio llevó a Velázquez a renunciar a su precandidatura presidencial por el Partido Colorado, lo que polarizó al oficialismo ante la inscripción después del cierre del proceso oficial del ahora exministro Arnoldo Wiens, en reemplazo del vicepresidente.
Sin embargo, el vicepresidente paraguayo se retractó este jueves de su anuncio inicial de abandonar el cargo y aseguró que solicitará “a los organismos correspondientes” pruebas de las acusaciones en su contra.
Incluso, se dijo dispuesto a recurrir “a las instancias judiciales estadounidenses para limpiar” su nombre y el de su familia.
Ya el pasado 22 de julio, Estados Unidos había señalado a Cartes de corrupción durante su mandato y, en específico, de “obstruir una investigación del crimen transnacional que involucraba a su socio”.
El exmandatario, que consideró “infundadas e injustas” las acusaciones, ha descartado la posibilidad de renunciar a su candidatura por la presidencia del Partido Colorado, a la que también aspira el gobernante Abdo Benítez.