El presidente de México, Enrique Peña Nieto, recibió este martes en el aeropuerto capitalino a 135 mexicanos que fueron deportados desde Estados Unidos, a quienes dijo que «no están solos» y les aseguró que el país está generando oportunidades de empleo.
En un acto privado en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México en el que también participó el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, el mandatario dio a los migrantes la bienvenida al país y les ofreció el apoyo del Ejecutivo.
«No están solos, no se sientan abandonados. Siempre estarán abiertas las puertas de esta su casa», dijo al grupo de deportados, según recoge el comunicado de prensa remitido por la Presidencia mexicana.
Indicó que en el país, a día de hoy, se están generando empleos y hay inversión productiva.
«México sigue creciendo, es un país que está generando oportunidades para sus connacionales, y yo espero que eso les permita encontrar un espacio aquí de desarrollo personal», afirmó Peña Nieto.
Aseguró que el proceso de repatriación de mexicanos provenientes de EE.UU. se ha modernizado, lo que permite que sea seguro, humano y ordenado.
Actualmente -remarcó- las autoridades nacionales están redefiniendo cómo se van a entender con su contraparte estadounidense, a partir de la nueva política migratoria de Donald Trump, quien ha expresado varias veces su intención de deportar a los millones de migrantes indocumentados que viven en EE.UU.
México buscará «llegar a un acuerdo con respeto a nuestra dignidad, con todo decoro, y siempre en la defensa de los intereses de los mexicanos», aseveró.
Esto si el pacto entre ambos países parte del principio de respeto mutuo y se sientan las bases para que haya confianza en el ejercicio y en lo que los dos Gobiernos tengamos que hacer, añadió el presidente.
En el evento, el comisionado del Instituto Nacional de Migración (INM), Ardelio Vargas, dijo que con EE.UU. se han acordado 11 puntos de repatriación, «lo que ha permitido tener, en cada uno, la logística adecuada para recibirlos».
Asimismo, señaló que el Gobierno impulsó la construcción de una bolsa de trabajo que ya está funcionando para beneficio de todos ellos.
La emigración mexicana de 2008 a 2015 disminuyó en un 43,5 %, si bien el saldo migratorio sigue siendo negativo para la nación, que registra una baja poblacional de 22,3 personas por cada 10.000 habitantes, según datos del instituto de estadísticas del país.
