El presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, instó este miércoles a sus compatriotas a llevar a cabo una «lucha frontal» contra el «machismo arraigado» en el país, durante la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, en la que lanzó un programa para capacitar y empoderar a las mujeres en la política.
En un acto en la residencia presidencial de Los Pinos en el que estuvo acompañado por su esposa Angélica Rivera y mujeres que desempeñan cargos públicos relevantes o son líderes en su sector, Peña Nieto ofreció un reconocimiento a las mexicanas por su importante contribución al desarrollo del país.
Remarcó que en su gestión ha asumido un compromiso por apoyar la paridad de genero, el respeto a la mujer y eliminar cualquier clase de discriminación, gracias al cual se ha actualizado el marco normativo en esos campos.
Por ejemplo, con la reforma político-electoral aprobada en 2013, que impone una cuota de 50 % entre hombres y mujeres en las candidaturas al Congreso federal (nacional) y los Congresos estatales (regionales).
Recordó que no fue hasta 1953 que México permitió el voto femenino y que las mujeres pudieran ser elegidas en las urnas, e hizo un llamado a la sociedad mexicana para buscar formas de erradicar y dar una lucha frontal contra toda expresión de machismo.
«Nadie puede ser cómplice por ignorancia o prejuicios heredados de una cultura machista», denunció, al subrayar que hay millones de mujeres en alguna parte de la geografía nacional que están siendo sometidas a violencia porque el machismo está arraigado y de manera muy acentuada en distintas regiones mexicanas.
En el acto fue presentado un programa gratuito de capacitación en política para las mujeres, ideado por el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (Trife) y el Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE).
La directora de Inmujeres, Lorena Cruz, exigió un cambio real en materia de igualdad de género, el camino correcto para el logro de una sociedad más justa y democrática.
Además, lamentó que solamente uno de los 32 gobiernos estatales del país esté encabezado por una mujer, Claudia Pavlovich (Sonora, norte).
La presidenta del Trife, Janine Madeline Otálora, pidió acciones efectivas en la materia, un imperativo ético y deber jurídico.
«Las mujeres hemos sido colocadas en situación de desventaja jurídica, económica y social», y existe «la premisa de que no tenemos nada que aportar al debate democrático y a las decisiones que se toman en un país por el simple hecho de ser mujeres», señaló.
Por eso recalcó la importancia del programa lanzado este miércoles, que permitirá «preparar a las mujeres para las diferentes funciones en el ámbito político y fortaleciendo el desempeño» en esas actividades.
«No puede haber ni paz, ni desarrollo, ni bienestar mientras no garanticemos los derechos y la dignidad de las mujeres», agregó.
El director del CIDE, Sergio López, explicó que el programa es «una plataforma para romper muros y abrir nuevas posibilidades de participación política» a las mexicanas, que se enfrentan a «barreras invisibles o normalizadas que les impiden acceder a estos espacios» de toma de decisiones.
