Ante la reciente detención de dos oficiales de la Policía Municipal de San Diego, la Directiva de la institución rechaza este tipo de conductas delictivas, por lo que el funcionario que incurra en algún delito «lo pondremos a la orden del Ministerio Público», sentenció el comisionado agregado Eleazar Villasmil, director general del organismo.
Luego de labores de investigaciones del Eje de Vehículos Carabobo, el pasado 10 de enero fueron detenidos los oficiales Freddy Alí César Moisés y Anny Cibel Perasa Key, por estar presuntamente implicados en varios robos y comercialización de motos.
En torno al caso, el comisionado agregado detalló que tras conocer el caso, prestaron todo el apoyo al Cicpc en su investigación y para dar con la captura de estos oficiales, ya que presuntamente delinquian mientras estaban francos de servicio y eran quienes se encargaban de vender las motos robadas, y así continuar con el proceso de depuración en las instituciones policiales en pro de grantizar un mejor servicio cada día.
«En todas los organismo de seguridad existen funcionarios que se desvían de sus funciones y lamentablemente, nuestra institución no escapa de esa realidad. Sin embargo, las responsabilidades son individuales y las acciones de algunos no son la condena de todos los que sí hacemos nuestro trabajo con ética, vocación y amor por servir, esta es una muestra que denunciando si se puede tomar correcciones para sacarlos de las calles», agregó Villasmil.
En ese sentido, el director de la PM instó a la ciudadanía que sea víctima de algún funcionario a denunciar sin temor. En el caso de San Diego, las oficinas de la Inspectoría de Control de Actuación Policial (ICAP) están ubicadas en el parque temático de La Esmeralda, cuyo personal está haciendo un trabajo transparente. «No sean complices al callar, solo denunciando podemos hacer justicia y sacar las manzanas podridas», agregó.
Nota de Prensa
