Funcionarios de la policía del estado desmantelaron un presunto centro clandestino de abortos, ubicado en un centro comercial de la avenida Aranzazu de Valencia, y detuvieron a una supuesta gineco-obstetra y a demás trabajadores del local.
De acuerdo a lo indicado por el director del cuerpo policial, comisario jefe José Aldama, los funcionarios patrullaban la zona cuando notaron a una joven que casi se desvanecía, cerca de un laboratorio clínico. La muchacha les informó que se había practicado un aborto y se desmayó.
Para reanimarla la metieron al laboratorio, donde los funcionarios notaron la presencia de otra mujer acostada en una camilla y al interrogarla confesó que también se había practicado un aborto.
Aldama precisó que gracias a la rápida acción de los policías, se practicó la detención de una gineco-obstetra de 51 años y su pareja de 44 años, quien fungía como administrador del lugar. También fueron aprehendidos una secretaria de 30 años y una mujer de 27 años que presentaba seis semanas de embarazo.
El jefe policial no suministró los nombres de ninguno de los detenidos.
Como parte del procedimiento, se logró incautar un sello elaborado en material sintético con una acreditación profesional de ginecología, un carnet, un teléfono celular y un vehículo modelo Astra, color azul, placa GBO450.
José Aldama señaló que según las averiguaciones, se pudo conocer que aparentemente este lugar funcionaba como un centro de abortos clandestinos en el cual se realizaban este tipo de prácticas ilegales, a cambio de altas sumas de dinero. El caso fue notificado a la Fiscalía 7° del Ministerio Público, organismo encargado de aplicar las sanciones correspondientes.