El ministro de Interior y Justicia de Venezuela, Néstor Reverol, informó hoy que varios cuerpos de la Policía vigilarán el traslado de alimentos por carretera en el país, tras los robos de comida a camiones, fincas y establecimientos comerciales registrados en los últimos días.
«Hemos diseñado 12 zonas ubicadas en los principales ejes carreteros del país con el apoyo de las Policías Estadales, Municipales, Policía Nacional Bolivariana (PNB) y Guardia Nacional Bolivariana (GNB, policía militarizada)», escribió el funcionario a través de Twitter.
La declaración de Reverol se produjo al término de varias reuniones entre la Asociación Nacional de Supermercados y AutoServicios (ANSA), el ministro de Defensa, Vladimir Padrino, y otros jerarcas de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), encargada de la soberanía alimentaria.
«Logramos establecer una estrategia que nos va a permitir garantizar la seguridad de las rutas desde los centros de producción hasta sus puntos de distribución», prosiguió el ministro, que señaló que cada tres kilómetros habrá mecanismos de vigilancia, sin especificar mayores detalles.
Reverol indicó también que las fuerzas del orden desplegarán un patrullaje inteligente para atender cualquier tipo de emergencia que se presente en los abastecimientos, que registran a diario colas con centenares de personas en búsqueda de los alimentos que escasean en el país.
Además, el Tribunal Supremo de Justicia procesará los casos de los empleados de los supermercados que cometen delitos con el bachaqueo (reventa de comida), agregó.
El vicepresidente de Venezuela, Tareck el Aissami, dijo el martes que el Gobierno obligará a las empresas del país a bajar los precios y volver a las cantidades a las que vendían sus productos en diciembre, después de acusar a los comerciantes de inflar aquellos injustificadamente a principios de año.
En las primeras dos semanas del año al menos una treintena de establecimientos fueron violentados en estados como Guárico, Trujillo y Mérida, mientras que más de una decena de camiones cargados de alimentos corrieron la misma suerte.
El gobernador de Mérida, el opositor Ramón Guevara, comentó a EFE la semana pasada que en ese estado este tipo de acciones habían dejado cuatro fallecidos y quince heridos, todos por arma de fuego, y que más de 200 reses habían sido descuartizadas por personas que irrumpieron en fincas alegando hambre.
Venezuela registra escasez de alimentos y medicinas desde hace varios años, un problema que se ha acentuado en los últimos meses, cuando el país entró en una espiral hiperinflacionaria.
