Foto referencial

Cientos de policías reprimieron con bombas lacrimógenas a miles de hondureños de la oposición que marcharon este viernes para conmemorar el 186 aniversario de la independencia centroamericana de España, mientras el gobierno llevaba a cabo su propia celebración con un desfile cívico.

Los opositores convocados por la «Convergencia contra el Continuismo» del presidente Juan Orlando Hernández iniciaron la marcha acompañados de bandas de guerra, por el bulevar Morazán hacia el parque central.

Intempestivamente llegaron unos 400 policías antimotines y lanzaron una lluvia de bombas de gases lacrimógenos en medio de las más de 5.000 personas, según estimaciones de la prensa.

Los manifestantes huyeron despavoridos en medio de una densa capa de humo, pero algunos cayeron al suelo intoxicados.

«Lo que estamos haciendo es protegiendo la propiedad privada» porque los manifestante «quiebran vidrios, rótulos, manchas paredes», justificó un agente policial a periodistas.

Los manifestantes, que llevaban una manta blanco y negro desplegada a lo ancho de la calle con la leyenda: «NO al continuismo. La reelección es un fraude», se reagruparon y continuaron su marcha.

Los policías «metieron infiltrados en la manifestación con gente con piedras para después justificar y gasearlos», denunció de su lado, el derrocado expresidente Manuel Zelaya.

La Convergencia contra el Continuismo está integrada por organizaciones populares y la Alianza de Oposición contra la Dictadura, impulsada por el expresidente Zelaya.

La movilización estuvo encabezada por el candidato presidencial de la Alianza para las elecciones del 26 de noviembre, Salvador Nasralla, un periodista deportivo y de farándula. Lo acompañó su esposa embarazada, Iroshka Elvir.

Hernández buscará la reelección por el Partido Nacional (PN, derecha). Aunque la Constitución prohíbe al presidente lanzar una nueva candidatura, el gobernante logró que la Corte Suprema de Justicia declara inconstitucional la prohibición.

Por su lado, el gobierno promovió un desfile de un kilómetro con estudiantes con bandas de guerra de 73 colegios y militares al Estadio Nacional, donde se reunieron más de 20.000 personas, incluidos  Hernández y sus ministros.

«El pueblo no puede tropezarse dos veces con la misma piedra», subrayó el presidente –en una ceremonia  previa–, en alusión al golpe de Estado de junio del 2009 que derrocó a Zelaya.




Estimado lector: El Diario El Carabobeño es defensor de los valores democráticos y de la comunicación libre y plural, por lo que los invitamos a emitir sus comentarios con respeto. No está permitida la publicación de mensajes violentos, ofensivos, difamatorios o que infrinjan lo estipulado en el artículo 27 de la Ley de Responsabilidad en Radio, TV y Medios Electrónicos. Nos reservamos el derecho a eliminar los mensajes que incumplan esta normativa y serán suprimidos del portal los contenidos que violen la Constitución y las leyes.