La representante del movimiento político Voces de Paz (ligado a las FARC) Imelda Daza urgió este lunes a formar una coalición política en favor del acuerdo de paz de cara a las elecciones presidenciales de 2018.
En una entrevista con Efe, Daza advirtió que el acuerdo de paz firmado por el Gobierno colombiano y las FARC estaría en «grave riesgo» si un colectivo político de los que se opusieron al primer acuerdo de paz en el plebiscito del pasado octubre ganara las elecciones del próximo año.
Por ello, consideró necesario estructurar una coalición política «integrada por sectores liberales, alternativos y de izquierda para impedir que una corriente fascista llegue a la presidencia».
Voces de Paz es una agrupación política de origen ciudadano que tiene por objeto impulsar el acuerdo de paz en sus diferentes etapas y está integrada por seis representantes elegidos por las FARC, tres en el Senado y tres en la Cámara de Representantes, que tienen voz pero no voto en las discusiones que tienen que ver con el acuerdo.
Daza, sobreviviente del exterminio del partido de izquierdas Unión Patriótica (UP), agregó que hay que imposibilitar que «una fuerza de derecha llegue a gobernar (a Colombia) y engavete el acuerdo de paz (con las FARC) y proceda como si nada hubiera pasado».
Recordó que el senador del opositor partido Centro Democrático José Obdulio Gaviria dijo que en «un Gobierno de las fuerzas políticas del ‘no’ el llamado acuerdo final y sus procedimientos ilegítimos serían puestos en entredicho y en discusión nuevamente».
Sin embargo, el máximo jefe de la oposición, el expresidente y senador Álvaro Uribe, matizó ayer en su cuenta de Twitter el planteamiento y aseguró que el «Centro Democrático no propondrá revocar los acuerdos con FARC, pero luchará para introducir los ajustes que taponen el camino castrochavista».
La líder de izquierda calificó de «oportunista» la declaración de Uribe y recordó que el «expresidente siempre ha manifestado abiertamente su desavenencia con los acuerdos de paz».
En el caso de que los opositores de los acuerdos llegaran a ganar en 2018, Daza indicó que espera que «respeten lo firmado», ya que sería «nefasto para el país puesto que el mundo», así como los países garantes y acompañantes del proceso de paz (Cuba, Noruega, Venezuela y Chile) y «muchas organizaciones internacionales están vigilantes de que los acuerdos se cumplan».
Daza explicó que es indispensable comenzar a trabajar ya en la construcción de esa coalición de partidos amigos de los acuerdos y manifestó que «un posible candidato de la convergencia y posible presidente de un Gobierno de transición sería Humberto de la Calle», jefe del equipo negociador del Gobierno en los diálogos de paz con las FARC.
El jefe máximo de esa guerrilla, Rodrigo Londoño, alias «Timochenko», ha propuesto desde el mismo momento de la firma del acuerdo de paz la necesidad de un Gobierno de transición que garantice su implementación.
La líder izquierdista aseguró que las propuestas políticas de las FARC a la coalición de partidos serán de «corte democrático».
«Se trata fundamentalmente de proponerle a los colombianos desarrollar a plenitud el acuerdo de La Habana, que se haga esa reforma rural integral, que se creen las zonas de reserva campesina, que haya más participación ciudadana en la vida del país, que el pueblo se organice para defender sus intereses y sus propuestas», agregó.
También propondrán «que sustituyan los cultivos de uso ilícito por cultivos que provean de alimentos al pueblo colombiano, que las víctimas de verdad seamos reparadas íntegramente y que se le ponga fin al conflicto».
Conjuntamente, «le propondrían al pueblo colombiano seguir en la lucha por alcanzar que todos los ciudadanos tengamos satisfechas las cinco necesidades básicas que tienen que ver con alimentación, salud, educación, vivienda y recreación».
«Todo esto en el marco de una democracia participativa, no tanto representativa como es lo que tenemos sino una democracia con más participación popular», finalizó.
