El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, criticó este domingo la abstención en las elecciones municipales que se realizan este domingo en el país.
«El problema de la abstención (es) que solamente tiene como alternativa la confrontación», dijo Ortega a los periodistas, luego de depositar su voto en una Junta Receptora de Votos (JRV) en Managua.
Al igual que en las elecciones generales de noviembre del año pasado, cuando Ortega fue reelegido como presidente, los centros de votación mostraron poca afluencia de votantes, lo que fue confirmado por los observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA) esta mañana.
En dichos comicios la abstención fue notoria. El Consejo Supremo Electoral (CSE) la estableció en 31,8 %, mientras que la organización no gubernamental Hagamos Democracia la ubicó en 68 %.
Ortega se preguntó «qué hubiera pasado si hubiesen decidido abstenerse en esas elecciones (1990) los que hoy promueven confrontación y abstención», en alusión a los comicios que ganó Violeta Barrios de Chamorro y que le apartaron del poder tras el triunfo de la Revolución Sandinista en 1979.
El gobernante nicaragüense acusó a quienes se fueron al exilio en los años 80 del siglo pasado como los que alimentan la confrontación y el odio hoy en Nicaragua, y reiteró su alta valoración por la paz y los votos en su país.
«Somos los que más valoramos la paz y la reconciliación, y somos los que más valoramos el voto, los procesos electorales, como único camino para el fortalecimiento de la paz y la democracia», sostuvo.
Ortega es el líder del oficialista Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), favorito para ganar la mayoría de alcaldías, tal como ocurrió en 2012, cuando ganaron 134 municipalidades de 153 posibles.
Este domingo los nicaragüenses eligen un total de 6.088 cargos, entre alcaldes, vicealcaldes, concejales propietarios y suplentes, en todos los municipios de Nicaragua.
