Los profesores de la Universidad de Carabobo resisten a pesar de la situación económica por la que atraviesan, pero lo hacen con la intención de evitar que esa casa de estudios sea convertida por el gobierno en una aldea.
El presidente de la Asociación de Profesores de la Universidad de Carabobo, Euclides Querales, reiteró que la situación económica de los docentes, con salarios irrisorios, no es distinta al resto de los trabajadores de las casas de estudios superiores.
Declaró a El Carabobeño que no hay nada que indique que la situación va a cambiar, pues por el contrario, el gobierno ratificó que su política de carácter salarial, que no es otra cosa que acabar con el salario y con el concepto de trabajo.
Igualmente con la legislación laboral, desde el mismo momento que desconoce la validez de las convenciones colectivas, así como las tablas salariales y las de homologación.
Querales dijo que los gremios han hecho los respectivos reclamos ante el Ejecutivo nacional, pero la respuesta ha sido el silencio.
También se refirió al abandono en que se encuentran las infraestructuras universitarias, lo cual sumado a los bajos sueldos, en su opinión se convierten en caldo de cautivo para que los trabajadores universitarios abandonen la institución.
“El firme propósito de ellos es convertir a la universidad en una aldea”.
El dirigente gremial insistió en que el gobierno está jugando al cansancio de los trabajadores, para que abandonen la universidad, pero ellos están en resistencia.
Citó que toda esta situación fue hecha del conocimiento de la delegación de los derechos humanos de la ONU que se encuentra de visita en el país.
Al referirse a los bonos que está otorgando el gobierno, a través de la plataforma patria, dijo que no llenan las expectativas económicas, porque en el mejor de los casos el beneficiado no llega a recibir más de 10 dólares al mes.
