Este veto se produce en pleno desarrollo y despliegue de las futuras redes móviles de quinta generación . Pataleta o no de Trump, la decisión del gigante de internet Google de romper con uno de sus principales valedores puede abrir una importante brecha en una industria que mueve anualmente medio billón de dólares. Una crisis sin precedentes. Y eso que, todavía, se desconoce si le seguirán los pasos otras firmas chinas que, en los últimos tiempos, han «democratizado» el mercado rebajando considerablemente los precios de los dispositivos móviles.

Los posibles escenarios y las consecuencias son imperceptibles ahora mismo. Incalculables como las posibles pérdidas económicas que puede sufrir el fabricante de telefonía móvil. Con todo, Huawei Technologies Co Ltd perderá acceso inmediato a las actualizaciones de Android y las próximas versiones de sus móviles tampoco contarán con aplicaciones y servicios como Google Play Store o, incluso, Gmail. Pero, por ahora, queda por saber si el veto de Google se aplicará a todos los móviles actuales de Huawei o será también para los que se lancen en el futuro.

Lo que está claro es que todavía es pronto para conocer el impacto de este anuncio histórico, pero es posible que se resuelva más o menos. Es poco probable. Nada más conocerse la decisión del gobierno estadounidense, Google ha querido mandar un mensaje de tranquilidad entre sus usuarios, aunque se espera que este veto tenga irremediablemente un gran impacto entre los consumidores.

«Estamos cumpliendo con la norma y analizando las implicaciones. Para los usuarios de nuestros servicios, Google Play y las medidas de seguridad de Google Play Protect continuarán funcionando en los dispositivos Huawei existentes», dicen desde Google

En un comunicado enviado a ABC, Huawei ha asegurado que ha contribuido considerablemente al desarrollo y crecimiento de Android alrededor del mundo, al tiempo que ha prometido que va a seguir proporcionando actualizaciones de seguridad y servicios postventa a todos los «smartphones», tabletas y dispositivos de la marca (y de su segunda marca, Honor), tanto a los que ya se hayan vendido como a los que siguen estando en stock en todo el mundo.

Sin actualizaciones ni descargas (por tanto, sin móvil)

La principal consecuencia del usuario de un móvil Huawei es que no podrán descargar nuevas aplicaciones ni tampoco recibir soporte técnico de Android. Aunque Google ha insistido en que Huawei sí contará con la tienda (Google Play) y, por tanto, con posibilidad de descargar aplicaciones, se desconoce qué sucederá con las futuras actualizaciones y parches de seguridad. En caso de que esto suceda, sus móviles actuales peligran en manos de los consumidores porque, en la práctica, se quedarán obsoletos.

A largo plazo dejarán de funcionar de forma correcta. La mayor consecuencia, la más esperable al menos, es que no se van a poder descargar nuevas aplicaciones en el teléfono a través de la tienda virtual de Google, aunque los servicios que ya se tengan descargados sí se podrán actualizar. Es decir, se podrá continuar utilizando servicios como Gmail, Translate, Maps, YouTube o Hangouts, pero no actualizar Android. Si es de los que se acaban de comprar uno el susto va a ser mayúsculo y obligaría a adquirir un terminal de otra marca próximamente.

Al aplicarse estas medidas por parte de Google y el gobierno de EE.UU., el futuro de Huawei pende de un hilo en este mercado. Y más teniendo en cuenta la siguiente controversia: Intel, Qualcomm o Broadcom han informado a sus empleados, según el medio Bloomberg, dejarán de facilitar componentes a Huawei «hasta nuevo aviso». «Aquí hay una guerra que es más que comercial porque, de hecho, tiene que ver con el dominio de internet por un lado y, por otro, el dominio de los sistemas operativos y la supuesta guerra de espionaje. Es una guerra por los dos bloques que están intentando dominar internet», sostiene a este diario Borja Adsuara, jurista experto en derecho digital.

Huawei puede desarrollar su propio Android

A diferencia de Apple, que se encarga de desarrollar tanto el hardware como el software a la misma velocidad, con lo que está en condiciones de controlar su evolución, Android es un sistema operativo libre. Teóricamente, los fabricantes de teléfonos deciden incorporar este ecosistema que ha contribuido a una reducción de costes y a favorecer la libre competencia del mercado. Apostar por este sistema se paga un precio; el creador del dispositivo no controla prácticamente nada sobre su actualización y desarrollo. En muchas ocasiones, sin embargo, son las propias marcas las que incorporan las llamadas capas de personalización basándose en el propio sistema Android.

Desarrollarlo desde cero es costoso, no solo en términos económicos: este sistema operativo se lanzó en 2008. Ya ha pasado mucho tiempo desde entonces. Aunque no se sabe con exactitud, en los dos últimos años se ha rumoreado que Huawei ha estado incluso probando su propio ecosistema.

Ha habido otros muchos intentos y, la mayoría, como en el caso de FirefoxOS, han resultado un fracaso.

Retirada del mercado móvil

Aunque es la medida más drástica, Huawei decidiría pasar página y retirarse del lucrativo mercado de la telefonía móvil en donde en muy poco tiempo se ha colado entre los primeros espaldas a nivel global. Sin duda también pasaría factura a Google, que se quedaría sin uno de sus pilares claves, perdiendo de una tacada millones de usuarios registrados en sus servicios.

¿Puedo reclamar si estoy afectado?

En caso de estar afectado por el veto, los usuarios y propietarios de teléfonos de esta marca pueden reclamar. Es sus términos de uso incluso la firma reconoce que el sistema operativo (en este caso, Android) forma parte del producto adquirido y puede generar responsabilidades en caso de mal funcionamiento. La garantía del producto incluye el uso del software, según consta en la página web oficial.

Lee el trabajo completo en  abc.es




Estimado lector: El Diario El Carabobeño es defensor de los valores democráticos y de la comunicación libre y plural, por lo que los invitamos a emitir sus comentarios con respeto. No está permitida la publicación de mensajes violentos, ofensivos, difamatorios o que infrinjan lo estipulado en el artículo 27 de la Ley de Responsabilidad en Radio, TV y Medios Electrónicos. Nos reservamos el derecho a eliminar los mensajes que incumplan esta normativa y serán suprimidos del portal los contenidos que violen la Constitución y las leyes.