Tras los resultados de los comicios regionales, que sectores de la oposición pretenden cuestionar para seguir atacando el orden institucional, ha llegado el final de posiciones duales frente al ejercicio de la política, indicó el analista político y periodista José Vicente Rangel.
«Ha llegado la hora de las definiciones: o se hace política en el marco de la Constitución y del sistema democrático, o se actúa en el terreno de la violencia para destruir a las instituciones. Terminó el tiempo del dualismo perverso, del dualismo sistemático ante la opinión pública», expresó en su programa José Vicente Hoy, transmitido por Televen.
En dicho espacio, el también exvicepresidente de la República indicó que la decisión de sectores antichavistas de concurrir a la jornada electoral del pasado 15 de octubre, tras cuatro meses de violencia insurreccional, fue interpretada como un intento por deslindarse de la violencia y sumarse al carril democrático y cívico mediante el sufragio.
Sin embargo, advierte, el comportamiento de quienes dirigen la oposición tras conocerse la decisión de los electores, que le dieron solo 5 de las 23 gobernaciones del país, evidencia un rechazo irresponsable al resultado del proceso y la renovación de los ataques al Consejo Nacional Electoral, al tiempo que siembra de nuevo dudas y la preocupación por el comportamiento de este sector.
«Algunos dirigentes opositores reaccionaron distinto, y reconocieron los resultados, pero un sector mucho más poderoso mantiene el mismo discurso antidemocrático y de desprecio por la institución del sufragio».
Se trata de una actitud que revela una «estúpida» ambigüedad con la cual se pretende engañar al país, especialmente ante la experiencia acumulada por el pueblo venezolano, cuya participación en la jornada comicial es interpretada por Rangel como una expresión de rechazo al pasado y de condena a la violencia.
El analista político también llamó a una visión responsable del desempeño que tiene la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB).
La Fuerza Armada, blanco de ataques de la derecha nacional y regional, se convirtió en semillero de ideas poderosas, se integró a las políticas de cambio social, económico y político vividas en los últimos 18 años, uno de los más importantes legados del presidente (Hugo) Chávez, y hoy en día cuenta con amplio respaldo por ser pilar de la estabilidad de la nación y de vinculación con el pueblo, expresó.
