Luego de recibir varias denuncias de vecinos, Douglas Jiménez y Ángel Luna, concejales de San Diego, realizaron un recorrido por la red ambulatoria de la zona, donde evidenciaron carencia de insumos para la atención al ciudadano.
Señalaron que la situación es preocupante, ante el repunte de COVID-19, pues los vecinos esperan recibir atención.
El concejal Luna manifestó que visitaton el CDI de La Cumaca, donde evidenciaron que prácticamente está cerrado. El módulo de salud ubicado en Monteserino funciona a medias al igual que el CDI de La Esmeralda.
En Sabana del Medio solo labora un médico con carencias de todo tipo, el CDI ubicado en Los Jarales presenta múltiples necesidades y una de sus prioridades en la dotación de implementos de bioseguridad.
Añadió que el mismo escenario se observa en el ambulatorio de Los Jarales cuyas carencias son muchas. Al ambulatorio del Pueblo de San Diego, los pacientes deben llevar todos los requerimientos básicos para su atención y desde hace más de tres años no tienen un tensiómetro.
Por su parte el concejal Jiménez aseguró que las políticas públicas implementadas por los gobiernos nacional y regional fracasaron en materia de salud.
“Todos los centros asistenciales del municipio presentan severas deficiencias, sin dotaciones, sin insumos básicos o elementales para la atención del sandiegano, por ello seguiremos denunciando este tipo de situaciones que afectan al ciudadano y que es un derecho consagrado en la Constitución”.
Con nota de prensa