El comisionado de las Grandes Ligas, Rob Manfred, continuó este lunes su gira por los distintos campos de entrenamiento de los equipos para dar a conocer la decisión de su oficina de utilizar durante los partidos de pretemporada el cronómetro entre los lanzamientos.
Como ya hizo en exposiciones anteriores, Manfred consideró «buena» la medida de cara a acortar la duración de los partidos.
Además, el máximo responsable del béisbol profesional, restó importancia a las quejas por parte de los jugadores de lo lenta que ha estado la contratación en el mercado de los agentes libres por parte de los equipos, dado que no piensa que sea algo intencional.
En su esfuerzo de encontrar maneras que reduzcan la duración de los partidos, los lanzadores tendrán 20 segundos para lanzar hacia el plato en los partidos de exhibición de Arizona y Florida a partir de esta semana.
La intención es que los jugadores y árbitros pueden acostumbrarse al cronómetro en caso que las Grandes Ligas decidan hacer el cambio reglamentario en la temporada regular de este mismo año.
«Vamos a empezar a prepararnos ante la posibilidad de usar el cronómetro para lanzamientos en el día inaugural», adelantó Manfred. «Hay que ponerse en marcha».
Después de las campañas de 2016 y 2017, los jugadores rechazaron la propuesta de las Grandes ligas del posible uso del cronómetro. Los dueños tienen la facultad de implementarlo este año sin consentimiento, pero Manfred se ha resistido a iniciar cambios sin recibir el visto bueno de los jugadores y el jefe de su sindicato, Tony Clark.
El sindicato informó que las Grandes Ligas les notificó que iba a tomar la decisión unilateral de usar los cronómetros en la pretemporada. Los cronómetros se han usado en los niveles más altos de las mayores desde 2015.
Mientras que con el inicio de los entrenamientos y los partidos de exhibición a partir del jueves, varios jugadores han denunciado que por segunda vez la apatía impera en el mercado de los agentes libres.
También cuestionan el que más equipos no tienen la ambición de ganar sino de buscar solo el control económico de sus plantillas.
Por su parte, Manfred argumentó que no ha habido un cambio significativo en la distribución de porcentajes de victorias en Grandes Ligas.
«Nuestros equipos están intentándolo. Cada uno quiere ganar», defendió Manfred. «Puede ser que se vea un poco diferente para gente no familiarizada porque el béisbol ha cambiado, la manera como se analiza, se concibe un equipo ganador ya no es lo mismo que antes, pero eso no significa que no lo estén intentando».
Dos de los grandes astros del béisbol, el jardinero Bryce Harper y el jugador de cuadro dominicano Manny Machado siguen sin firmar, al igual que el cerrador Craig Kimbrel y varios otros veteranos con experiencia.
«Tenemos a 11 jugadores con un WAR (victorias sobre el jugador reemplazo) sobre 1 del año pasado que no han firmado», informó el comisionado de las Grandes ligas. «Creo que al igual que la pasada temporada, el mercado acabará despejándose».
Manfred se mostró confiado que en algún momento en las próximas semana, esos jugadores iban a firmar nuevos contratos.
«Negociamos un sistema que permite que el mercado funcione y tengo toda la confianza que esos jugadores que acabó de describir, el mercado se despejará ante de iniciar la temporada», reiteró el comisionado de las Grandes Ligas.
Manfred indicó que el que los equipos no gasten en plan grande no significa que no tengan el objetivo de ganar.
En este sentido se refirió a los Atléticos de Oakland y Rays de Tampa Bay, dos equipos con nóminas modestas que fueron señalados para tener malas temporadas en 2018, y al final consiguieron excelentes resultados.
Los Atléticos se clasificaron a los playoffs con 97 victorias y los Rays ganaron 90 juegos dentro de la poderosa División Este de la Liga Americana.
«Rechazó el planteamiento que la nómina es una buena medida a la hora de saber que tanto un equipo esté intentando ganar o lo exitoso que pueda ser», argumentó Manfred.
Sin embargo, algunos jugadores, como el abridor estelar de los Astros de Houston, Justin Verlander, respondieron al comisionado de las Grandes a través del Twitter de forma irónica sobre su postura.
«Estoy de acuerdo… ¡finalmente estamos en sintonía! ¡Fenomenal! Que sea eliminado el impuesto de lujo», escribió Verlander en su Twitter, en referencia al gran condicionamiento que es para los equipos más modestos el poder invertir en los mejores jugadores.
