El objetivo de la persona que ingresó a la residencia de Flor Marina Castro de Vidal (79) en Los Naranjos, era apoderarse de la medalla olímpica de su hijo mayor, el nadador Rafael Vidal (+), así como otras preseas obtenidas durante su carrera.
Así lo confirmaron el comisionado Einer Giulliani, director de Seguridad Ciudadana y el director de la Policía de El Hatillo, supervisor jefe Marcos Rodríguez Moncada, durante la rueda de prensa para aportar elementos relacionados con el caso. Agregaron que no se observó ninguna señal de violencia en la entrada del inmueble, presumen que se trata de una persona allegada a la familia o hubo complicidad interna.
“Luego de recibir una llamada por parte de los vecinos de la urbanización Los Naranjos para reportar el fallecimiento de la ciudadana, los funcionarios de la Policía de El Hatillo se trasladaron al lugar de los hechos y pudieron percatarse de que los asesinos y ladrones solo se llevaron las medallas de oro del ex nadador olímpico Rafael Vidal, así como unos elementos de platería de acuerdo a lo cotejado con la hija de la señora Castro, por lo que presumimos que existe una complicidad interna”, explicó Giulliani.
Aseveró que la Policía de El Hatillo y el Cicpc realizan las investigaciones para ofrecer el desenlace de este caso en las próximas horas, pues las mismas ya se encuentran bien adelantadas. Será la policía científica la que ofrezca los detalles.
El lunes 10 de abril fue encontrado el cadáver de la ciudadana en su residencia ubicada en la avenida Sur 3 y de acuerdo con las primeras pesquisas, fue asesinada por personas que ingresaron a robar.
La localizó su hija al acudir a la vivienda porque intentaba comunicarse con ella desde el domingo. Presentaba una herida en la cabeza ocasionada por un objeto contundente.
