Rusia anunció el 25 de enero que no invitará a los observadores de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa a las elecciones presidenciales del próximo 18 de marzo, en las que el jefe del Kremlin, Vladímir Putin, buscará la reelección.
El jefe del Comité de Asuntos Internacionales de la Duma o cámara de diputados, Leonid Slutski, adelantó que sí han sido invitados, en cambio, los observadores de la Organización para la Cooperación y Seguridad en Europa (OSCE).
Rusia ya había impedido en 2016 que el Consejo de Europa y la Oficina para las Instituciones Democráticas y los Derechos Humanos (ODIHR) de la OSCE supervisaran los comicios parlamentarios.
La Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa privó en 2014 a Rusia de sus competencias, entre ellas el derecho de voto, tras la anexión rusa de Crimea, motivo por el que la delegación rusa suspendió su labor en dicha cámara.
En junio pasado, el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, informó al secretario general del Consejo de Europa, Thorbjørn Jagland, de que suspende el pago de su contribución al presupuesto de la organización.
Precisamente, en diciembre de 2011 la misión de observadores de la OSCE y del Consejo de Europa denunció numerosas irregularidades durante el proceso de escrutinio de los comicios legislativos.
Las denuncias de fraude en favor del partido del Kremlin, Rusia Unida, desembocaron entonces en las mayores protestas antigubernamentales desde la caída de la URSS en 1991.
En cuanto a la ODIHR, Rusia ha acusado en numerosas ocasiones a la OSCE de emitir valoraciones politizadas sobre los procesos electorales en el espacio postsoviético con el fin de desestabilizar la situación en esos países.
El líder de la oposición extraparlamentaria rusa, Alexéi Navalni, ha convocado una huelga de votantes después de que la comisión electoral rechazara su candidatura presidencial, aduciendo que está inhabilitado por tener antecedentes penales.
Navalni ha advertido que, en esta ocasión, las autoridades no manipularán los resultados, ya que la victoria de Putin está cantada, sino los niveles de participación, puesto que la abstención en las parlamentarias fue de más del 50 por ciento.
Putin, que ganará las elecciones con un récord histórico de votos, según las encuestas, acusó la pasada semana a Navalni de ser el candidato preferido de Estados Unidos.
