Si faltaba algo en la temporada de Salvador Pérez era liderar un departamento ofensivo en las Grandes Ligas. Un golpe sobre la mesa que dio el criollo el pasado miércoles, al arribar a 104 impulsadas para ser líder en el mejor béisbol del mundo.
El ritmo y la comodidad que ha desarrollado cada vez que entra a la caja de bateadores ha sido impresionante. Tanto así que, registra una racha de siete partidos en fila con al menos un hit, tramo en que ha sumado 10 carreras remolcadas.
“Lo que estoy logrando significa mucho, porque sé el arduo trabajo que hice en la temporada baja. Cuidé mi cuerpo y me puse en la posición correcta para llegar a tope”, dijo el criollo tras vivir su mejor año en Las Mayores.
Pérez ha aprendido del pasado. Sabía que tenía una marcha más por dar, pero debía trabajar horas extras para explotar por completo ese potencial. Lo hizo y hoy en día se ha convertido en una de las estrellas que más alumbra el certamen en la gran carpa. Esto, gracias a 42 jonrones, 19 dobles, 72 carreras anotadas y .276 de average.
“Voy a dar lo mejor de mí todos los días. Pase lo que pase, jugaré con todo hasta el final de la temporada y luego ver en que lugar quedo. Si veo un lanzamiento por la zona de strike voy a intentar llevarlo a lo profundo”, comentó el receptor sobre la mentalidad y la agresividad en el home plate.
Por otro lado, el valenciano tiene en la mira alcanzar los 50 cuadrangulares en la temporada y terminar siendo líder en dicho departamento en el cual se encuentra a uno de, Shohei Ohtani, quien posee 43. El receptor criollo tiene 23 juegos por delante y las proyecciones de ESPN visualizan que podría cerrar la zafra con la marca soñada.
Con información Líder.
