El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, reveló este miércoles que el Ejecutivo está planteando «desde hace varios días» a la Unión Europea, además del cierre del espacio aéreo a aeronaves rusas, que ya está en vigor, el cierre de todos los puertos marítimos a embarcaciones con bandera de Rusia.
Lo explicó en el Congreso de los Diputados, donde hoy comparece en un debate para informar de la invasión de Rusia a Ucrania, y donde insistió en el mensaje de unidad porque el desencuentro de las distintas fuerzas políticas es «el mayor regalo» que se le puede hacer al presidente ruso, Vladimir Putin.
Respecto a los puertos, manifestó que si no había anunciado antes que había reclamado su clausura para las embarcaciones rusas, es porque para él lo importante no es si un país u otro es «el primero» en anticipar alguna medida contra Rusia, sino «que lo hagamos todos unidos, en respuesta conjunta».
Cerrar todos los puertos a barcos rusos
Hoy se supo que el Gobierno pidió a los puertos españoles información sobre las embarcaciones de bandera o propiedad rusa atracados en ellos, para evaluar el impacto que tendrían posibles sanciones en el ámbito del tráfico marítimo, según aseguraron a EFE fuentes oficiales.
No obstante, esas fuentes añadieron que queda por aclarar cómo se aplicarían las posibles sanciones en España y si debería intervenir la autoridad judicial en este tema.
Por el momento, el Ejecutivo recoge información del número de embarcaciones con bandera rusa o armadores rusos superiores a 24 metros que se encuentran en los puertos españoles, según las fuentes de la Dirección General de la Marina Mercante, dependiente del Ministerio de Transportes.
Es habitual ver en puertos españoles del mediterráneo yates atracados de millonarios rusos.
Magnates rusos
En concreto, en Barcelona (noreste) hay varios grandes yates en reparación, si bien fuentes de la empresa encargada explicaron a EFE que no pueden facilitar datos de los mismos debido a los estrictos contratos de confidencialidad que se suscriben con los propietarios.
Han pasado o están en estos astilleros los yates de lujo cuya propiedad se vincula a conocidos magnates rusos, como Roman Abramovich o Sergey Victorovich Chemezov, aunque las banderas de estas embarcaciones son de conveniencia y figuran como propiedad de diversas sociedades.
A raíz de la guerra desatada por Rusia en Ucrania, la Unión Europea aprobó diversas sanciones que afectarían al patrimonio de empresarios cercanos al presidente Vladimir Putin, y muchos de ellos son propietarios de embarcaciones de lujo y grandes casas ubicadas en varias ciudades españolas, principalmente Málaga (sur), Mallorca (este) y localidades de la Costa Brava (noreste).
