El antiguo centrocampista de la selección alemana Bastian Schweinsteiger recibirá un homenaje en su último partido con la camiseta del Bayern el martes (18h30 GMT) en el Allianz Arena, que se presume emotivo en el duelo entre el club de su vida, el Bayern de Múnich, y su actual club, el Chicago Fire.
A sus 34 años, el excapitán de la Mannschaft disputará un tiempo con el Bayern y otro con el Chicago.
Schweinsteiger dejó el club bávaro para recalar en el Manchester United en 2015, después de 17 años y 20 títulos con el Bayern.
El campeón del mundo en 2014 disputó más de 500 partidos con el Bayern de Múnich, al que llegó con 13 años.
«Fue una gran época para mí, el Bayern estará siempre en mi corazón y sé que será emotivo», confesó Schwensteiger.
Su despedida de la afición bávara se avecina emotiva, y podría dar lugar al llanto del jugador, como ya ocurriese con motivo de su retirada de la selección alemana, con la que jugó 121 partidos, en un amistoso ante Finlandia hace dos años en Moenchengladbach.
El domingo recibió la Orden de Mérito de Baviera en una ceremonia en la que el Primer Ministro de la región Markus Soeder le definió como «una leyenda viva».
Su última aparición con la elástica roja del Bayern fue en mayo de 2015 ante el Maguncia (2-0), cuando anotó un gol.
«En aquella ocasión no tuve oportunidad de decir adiós, así que estoy muy agradecido al Bayern porque me haya dado este partido de Bundesliga», afirmó.
Luego de 18 meses en el club de Old Trafford, fichó por Chicago en 2017.
