Esta semana fuimos testigos de cómo la Fiscal Luisa Ortega Díaz, volvió a levantar su voz para defender la restitución del hilo constitucional en Venezuela e interpuso en el TSJ un recurso para declarar la nulidad de la convocatoria emprendida por el loco de Miraflores para imponer la prostituyente y luego un recurso para declarar nula la designación de los magistrados express, que como era de esperar, ambos fueron declarados inadmisibles por el bufete de la dictadura, con una celeridad sin precedentes.
han sido agotados mecanismos constitucionales necesarios para pasar nuestra resistencia pacífica a otro nivel
Pero aunque los recursos fueron anulados hemos ganado nuevos espacios, una vez más quedó en evidencia para el mundo la postura partidista del máximo ente judicial en Venezuela, ante su necesidad de respaldar los caprichos del loco de Miraflores a como dé lugar. A su vez, han sido agotados mecanismos constitucionales necesarios para pasar nuestra resistencia pacífica a otro nivel.
Sabemos que tras más de 70 días de resistencia pacífica las dudas han empezado a hacerse presentes en muchos de los venezolanos que nos acompañan en esta lucha, y a todos ellos les pedimos que se pregunten si creen que la dictadura está más fuerte o más débil que cuando iniciamos esta lucha, si creían posible que la Fiscal Luisa Ortega introdujera un recurso ante el TSJ en contra de la selección de los magistrados express o para ir en contra de algún capricho de Maduro, o ver a familiares de altos funcionarios del gobierno manifestándose por redes sociales, llamándoles a la reflexión.
Todas estas acciones han sido el resultado de la presión ejercida en la calle, gracias a ciudadanos comprometidos a recuperar su libertad, a vivir en un país donde no haya que hacer colas para tratar de comprar comida, donde enfermarse no sea un lujo y comprar medicinas un suplicio. Una sociedad comprometida con un futuro mejor, convencidos de que vamos a triunfar porque somos mayoría y estamos del lado correcto de la historia.
Así que no podemos permitir que la desesperanza invada nuestros corazones, sabemos que estamos viviendo momentos muy duros, quizás los más oscuros de la historia de nuestro país, pero también debemos recordar que siempre se hace más oscura la noche justo antes del amanecer, y ya estamos por ver un nuevo amanecer Venezuela.
