Al menos seis civiles, entre ellos dos niños, murieron en la noche del sábado por ataques aéreos del régimen sirio contra el bastión rebelde de Guta Oriental, cerca de Damasco, donde disminuyeron los bombardeos tras varios días de una violencia sin precedentes, informó este domingo una oenegé.
El régimen de Bashar al Asad intensificó el 5 de febrero sus ataques contra esta zona, donde en cinco días murieron más de 240 civiles, entre ellos unos 60 niños, y se registraron cerca de 775 heridos, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
Sin embargo, el sábado había sido un día relativamente tranquilo. Las fuerzas del régimen tuvieron otro frente de batalla, con una serie de ataques aéreos realizados por Israel contra blancos militares del poder en Damasco y de su aliado iraní.
«Los ataques aéreos sobre Guta se reanudaron el sábado en la noche, matando a seis civiles, entre ellos dos niños, después de una interrupción de casi 24 horas», precisó a la AFP el director de la OSDH, Rami Abdel Rahmane, que dio un parte de mas de 50 heridos.
Asediados desde 2013 por las fuerzas del régimen, los 400 mil habitantes de Guta Oriental sufren escasez de comida y medicamentos y hay niños en peligro de muerte por desnutrición.
Los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU evalúan un proyecto de resolución pidiendo un cese el fuego de 30 días en toda Siria para permitir la distribución de ayuda humanitaria.
Las negociaciones para alcanzar un acuerdo sobre ese texto están prevista el lunes pero se ignora la postura de Rusia, miembro permanente del Consejo con derecho a veto y aliado del régimen del presidente Asad.
Más de 13,1 millones de sirios necesitan actualmente ayuda humanitaria, de los cuales 6,1 millones están desplazados dentro del territorio desde el inicio de la guerra civil hace siete años. El conflicto ha causado más de 340 mil muertos.
