En la Maternidad Ana Teresa de Jesús Ponce, ubicada en Macuto del estado Vargas también la crisis roza lo inhumano: Al menos 15 parturientas, la mayoría primerizas, han sido devueltas a sus casas porque no había médico ginecobstetra para asistir los casos de cesárea, tampoco neonatólogos para atender a los recién nacidos.
“Una de las mujeres convulsionó en las puertas del materno infantil luego de dos días de ruleteo”, expresó Carolina Salazar, una de las afectadas. “El viernes en la noche vine con las dilataciones y me enviaron al materno del Seguro Social. Allá me rechazaron porque la sala de parto está contaminada. Ahora, ¿no sabemos qué hacer”.
De acuerdo con la información, las devuelven a sus domicilios para simular que no hay pacientes en espera de parto. “Estamos angustiadas porque ellos solo atienden el parto natural y las que necesitamos cesárea quedamos a la deriva. Solo asisten estrictas emergencias; es decir, exponen la vida del niño y la madre por su negligencia”.
Ayer domingo estaba prevista la visita de la primera dama por el Día de la Madre. “Como siempre, aquí nunca pasará nada”, se quejó Jenni Delgado, otra de las madres afectadas.
La maternidad estaría atendiendo solo estrictas emergencias y partos naturales, lo que deja a la deriva a las madres que requieren cesárea por alguna complicación durante el embarazo o el alumbramiento.
Esta situación vino a agudizarse, luego de la muerte de seis niños por la contaminación en el Hospital del Instituto Venezolano de Seguro Social Dr. José María Vargas, de la Guaira, lo cual ha colapsado la atención hospitalaria en el litoral guairense.
Las muertes de los niños, se habría producido a consecuencia de que un cadáver se descompusiera y causó focos de infección que afectó la sala donde se encontraban los pequeños hospitalizados, de acuerdo a lo reseñado por el diario La Verdad de Vargas.
Al parecer, los padres tenían dificultad para retirar el cadáver porque no disponían de recursos. “Hay familiares que tienen que hacer los cajones para enterrar a sus deudos sin velatorio”, manifestó.
Algunos de los niños, sufrieron paros respiratorios. Como también, ocurrió que el hospital no cuenta con antibióticos, para tratar a los neonatos. El hospital está contaminado y los pacientes se encuentran en peligro.
Por cierto, el servicio de pediatría de este centro de salud no cuenta con neonatólogos para atender a los recién nacidos y solo están atendiendo partos naturales. E igual que los otros centros hay déficit de médicos, de insumos; solo hay voluntad de quienes quedan prestando servicios, bajo condiciones inhumanas que no garantizan una debida atención.
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