Markeith Loyd, el afroamericano que mató a tiros a una mujer policía cuando trataba de arrestarlo en 2017 en la ciudad de Orlando (centro de Florida, EE.UU.), fue condenado este jueves a la pena de muerte en un tribunal del condado de Orange.
Un jurado popular ya había recomendado en diciembre pasado la pena capital para Loyd por la muerte a tiros de la agente Debra Clayton, de 42 años, a la que disparó mientras huía tras matar a su exnovia embarazada, Sade Dixon, en diciembre de 2016.
La jueza Leticia Marques siguió la recomendación unánime de los 12 miembros del jurado y sentenció a Loyd, de 46 años, a la pena de muerte.
Sobre el condenado pesaban cinco cargos, incluido el de asesinato en primer grado por la muerte a tiros de la teniente de policía Clayton afuera de un supermercado Walmart en 2017.
Sentencian a muerte al asesino de una mujer policía
El jefe de la Policía de Orlando, Orlando Rolón, señaló hoy en un comunicado que la condena a muerte de Loyd «no puede deshacer el dolor de corazón causado por estas acciones atroces», pero trae «consuelo a nuestra comunidad» saber que un «peligroso asesino «hará frente a la más alta pena prevista por la ley».
Recordó a la agente policial caída en servicio, cómo ella «impactó las vidas» de aquellos que la conocieron y la importancia de su «liderazgo e implicación» en programas de la Policía.
Su «legado permanecerá y vivirá por todos los que la rodearon y se vieron impactados por ella» y su deseo de «guiar a nuestros jóvenes en una dirección positiva».
Loyd pidió dirigirse al tribunal después de escuchar la sentencia, pero le fue denegada la petición y lo sacaron de la sala, recogió el canal WKMG TV.
Loyd cumple ya cadena perpetua sin libertad condicional por el asesinato de su exnovia.