La crisis sanitaria en Venezuela llegó al limite. No se tiene ningún recurso que ofrecer a los enfermos y se observa con pena e impotencia el deceso de muchos de ellos por falta de medicamentos y diferentes insumos, según pronunciamiento de la Sociedad Venezolana de Infectología.
Pero, aunque lo han venido denunciando de forma reiterada la escasez de insumos en dimensiones incalculables y repercusiones importantes en la salud de la población venezolana, las autoridades no toman los correctivos necesarios.
Según reportes oficiales, el repunte de enfermedades infecciosas que ya habían sido erradicadas o por lo menos controladas, algunas prevenibles por vacunas y otras que reflejan la falta de un control sanitario adecuado.
La Malaria o Paludismo, por ejemplo, una enfermedad trasmitida por vectores, rompió récord de incidencia luego que desde 1961 estaba controlada y solo se reportaban 6000 casos anuales, para el 2016 se reportaron 240.717, lo que representa un incremento del 16,4% con respecto al 2015.
Las entidades más Ciudad Bolívar, Delta Amacuro, Monagas, Sucre, Apure, Zulia y Guárico, además reportando casos en 16 entidades federales exportadas de Bolívar. Se notificaron un número importante de muertes en virtud de la carencia de métodos diagnósticos y medicamentos antipalúdicos para combatir esta enfermedad.
2. Difteria: Luego de 24 años de ser erradicada la epidemia de Difteria, vuelve a ser afectado el estado Bolívar con el fallecimiento de 22 niños por esta enfermedad, prevenible por vacunas lo que indica una baja cobertura de vacunación en nuestro país. En la actualidad febrero de 2017 se reporta otra muerte de una niña por Difteria y en el mes en curso otros dos fallecimientos por confirmar, con escasez de vacuna para prevenirla y de antibióticos para contrarrestarla.
3. VIH-SIDA: Existen graves fallas con el suministro de medicamentos antirretrovirales para tratar a las personas que han contraído el virus de inmunodeficiencia humana (VIH), específicamente Zidovudina y Lopinavir/Ritonavir, para niños y adultos.
Sólo se dispone de un solo esquema de tratamiento para iniciar, el cual no siempre es adecuado para todos los pacientes y además no es el ideal según la normativa internacional. También, hay déficit de reactivos para la realización de pruebas de detección primaria del VIH (ELISA de cuarta generación), así como de pruebas de monitoreo y control para el tratamiento de la infección (Subpoblación Linfocitaria CD4+, Carga Viral, Test de Resistencia).
4. Diarrea en niños: En el acumulado de la semana 52 del boletín epidemiológico reportó 1.354.925 casos de diarrea en menores de 5 años en 2016 en comparación con el acumulado para la misma fecha de 1.160. 625 de 2015. La falta de campañas de educación y agua potable contribuyen de manera importante a este desenlace.
Tampoco en los establecimientos públicos ni privados hay antibióticos de amplio espectro de importancia vital para tratar a enfermos con infecciosas graves en áreas de hospitalización y en las unidades de terapia intensiva.
Otro cuadro vergozoso, sobre los incrementos en Dengue, Chikungunya y ZIKA.E Hay reportes de 854 casos de Síndrome de Guillain Barré (un tipo de parálisis ascendente donde el tratamiento específico es la inmunoglobulina y plasmaferesis con muy poca disponibilidad en el país). Igual de microcefalia, malformación neurológica que se inicia en el embarazo y trae graves consecuencias para el recién nacido tanto en la esfera cognitiva como motora, con reporte de mortalidad asociada a esta causa.
Y de Escabiosis, en la zona central de los estados Lara, Miranda y Vargas. Como de fiebre Hemorrágica Venezolana: Enfermedad viral hemorrágica y grave, llamada Fiebre de Guanarito con brote importante reportado extra-oficialmente en el estado Portuguesa y en el estado Barinas, con 12 fallecimientos.
No obstante, exijen que como no se cuenta con alertar tempranas por parte de las autoridades, solicitan la publicación semanal del Boletín epidemiológico. Y exhortan a las autoridades sanitarias a tomar los correctivos necesarios para controlar está crítica situación de salud que ha traído definitivamente un aumento de la morbi-mortalidad en la población venezolana. Reiteramos la mayor disposición de la Sociedad Venezolana de Infectología para el soporte técnico que a bien pueda requerirse para mejorar esta situación.
