Supermercados de la ciudad pierden clientela al permanecer semi vacíos desde finales de diciembre. Los compradores acuden con frecuencia, pero al encontrarse que siempre buena parte de los anaqueles están vacíos, y los pocos productos que hay en existencia están sumamente caros, prefieren ir a buscar sus alimentos en otro sitio.
El panorama en los supermercados es desolador. No solo están vacíos los anaqueles, sino también las neveras donde una vez se ubicaron los alimentos que tenían mayor demanda. Para que no se note la escasez, algunos comercios del ramo han optado por rellenar los anaqueles con productos repetidos.
Tenemos entonces que un pasillo puede estar conformado solo por agua potable y perrarina en ambos lados, los cuales tienen poca demanda por los altos precios.
Un ejemplo de esta situación se refleja en Abastos Bicentenario de la avenida Bolívar norte de Valencia, donde es muy poco lo que la gente consigue, lo cual ha alejado a la clientela. De 42 cajas para pagar solo quedan funcionando unas ocho, que son suficientes para atender a tan bajo número de personas que allí acude diariamente.
Rebeca Ruiz comentó este lunes que entró a la tienda a ver si conseguía café molido, porque este rubro es comercializado por el Gobierno Nacional en su totalidad, sin embargo se fue con las manos vacías.
Algo similar le ocurrió a Joaquín Centeno, quien aspiraba comprar un litro de aceite Diana el cual produce el gobierno.
Quienes sí corrieron con suerte, fueron quienes se enteraron que estaban vendiendo carne a 210 mil bolívares el kilo, pues de inmediato formaron la cola para comprar. Una de las clientes comentó que esto había que aprovecharlo porque en la tienda no se vendía carne, desde principios del año pasado.
En esta tienda un kilo de zanahoria se ofrece en 72 mil bolívares y el de pimentón en 46.428 bolívares. El kilo de papas está en 38.400 y el se limón en 51.600 bolívares.
El desabastecimiento también se siente en supermercados de cadena. Los gerentes se niegan a comentar sobre la situación, pues temen ser sancionados por el gobierno. Solo llegan a señalar que ubican los productos que les llevan los proveedores.
