Se supone que el folklore
es ese saber del pueblo,
pero, precisa del hombre
para poder conocerlo

Y esa tarea la cumplió
el compa Víctor Hermoso
entre cuero, canto y verso
un devoto fervoroso

Había nacido don Víctor
en el pueblo de Cumboto
Costa de Oro aragüeña
café, cacao y topochos

Su papá fue don Gregorio
María Hermoso su mamá
Cantadora y bailadora
«Capitana de San Juan»

Y Víctor desde pequeño
le acompañó en los parrandos
así aprendió de San Juan
de Cumboto y cruz de mayo

Era el año treinta y dos
un doce de abril exacto
cuando nació este cultor
que con San Juan hizo pacto

No solo con el  San Juan
también con la cruz de mayo,
de brindarle sus cantares
entre relámpago y rayo

Cumboto, palabra afro
la componen dos vocablos
se traduce entre nosotros
«Refugio de los esclavos»

Allí creció ese muchacho
ahí se hizo sanjuanero
y entre labores del campo
afinaba su guargüero

Allí nacieron, me cuentan,
esos sus primeros versos
para el San Juan y la cruz
y también para su pueblo

Por esas cosas del mundo
se fui a vivir a Caracas
allí trabaja en la Chrysler
donde, con bien se destaca

Pero la empresa la cierran
y se traslada a Valencia,
General Motors lo llama
y otras vivencias comienzan

Y allí como soldador
laboró veintisiete años.
Su casa en la Isabelica
con San Juan y cruz de mayo

Pero es con el San Juan
que siente su compromiso
y escribe algunos cantos
que hoy por hoy son exquisitos

«Un ramillete de flores»
Popular con San Millán
«Domingo López»; un golpe
El Hacha, y a su San Juan

Integró la agrupación
de nombre, Budare y Leña.
Y el San Juan de Bello Monte
es don Víctor, quien lo lleva

Junto a la familia Díaz
comienza la travesía,
el culto a San Juan Bautista
abraza feligresía

Comenzando los ochenta
se hace sentir su San Juan,
y otros barrios de Valencia
también quieren celebrar

Barrio América, el Canaima
por La Raya y Belle Vista
y en el trece de septiembre
nacía un San Juan Bautista

Por allá por Trapichito,
y en el barrio 3 de Mayo,
en el barrio Vuelvan Caras
del municipio Los Guayos

Y otros más tal vez nacieron
pero no se mantendrían
muchos piensan que es muy fácil
mantener la romería

Eso si, hay que decirlo
que cada nuevo San Juan
buscaba la bendición
de Víctor, ¡El Capitán!

Así que Víctor Hermoso
nos sirvió de inspiración
para impulsar el San Juan
en todita la región

Ese santo parrandero
primo hermano de Jesús
que en el rio del Jordán
bautizara con su luz

Ese San Juan de creencias
avemaría y sirenas
del sangueo, el de los golpes
con escolta de banderas

Tradición del pueblo afro
que llegó por la región
con sus cantos de alegría
compromiso y devoción

Eso nos trajo el maestro
y hay que decir la verdad
afianzando lo que llaman
afrocarabobeñidad

Porque aunque era de otras tierras
sembró aquí su corazón
con valores, con ejemplos
y una hermosa tradición

«Es que el culto a mi San Juan
no es solo tocar tambor,
existe algo más profundo
que se llama devoción»

Así hablaba este cultor
a los muchachos de ahorita,
que solo bailan y tocan
sin compromiso en su lista

Que se aburren o molestan
con lo más devocional
cantarle el avemaría
y saberlo sirenear

Hacerle un bonito altar
velas, flores y banderas,
un nicho para el sangueo,
y sus cantos de sirena

Que no falte en ese altar
Nuestra Señora del Carmen
telas rojas, de cortinas
unas maracas y laures

Recibir con buena vibra
cuando llega otro San Juan.
Que haya orden y respeto,
al llevarlo a bautizar

Eso siempre lo decía
como si fuera lección.
Hoy muchos lo han aprendido,
otros creen que es “vacilón”

Gracias don Víctor, por todo
por su amor hacia lo nuestro
por enseñar a querer
nuestro folklore tan inmenso

Pero antes de despedirme
quisiera hablarles un poco
de Víctor Hermoso, el padre
amigo, abuelo y esposo

Aunque de carácter regio
era muy dicharachero
solidario, consecuente
y un amigo muy sincero

Se casó con la llanera
doña María de los Santos,
matrimonio productivo,
tuvieron cinco muchachos

Víctor, Marcos y José
Liliana, Saúl… bordón
que aprendieron de valores
y como suena un tambor

También llegaron los nietos
a continuar el legado
es la herencia más hermosa
que su abuelo, ha dejado

Son; José, Solían, con Edli
Edgar, Víctor, luego Edgardo
está Victoria y Fernanda
su deber es continuarlo

Dos bisnietos se preparan
a seguir la tradición
como Edwin e Isabela,
que ya cargan su tambor

Por lo pronto está Liliana
heredando el pabellón
ella toca, baila, canta
y conoce de folklore

Varios reconocimientos
recibió este cultor
de la Casa del Artista
por su empeño y su tesón

Un patrimonio viviente
la nación lo declaró
con la Orden Michelena
la Alcaldía Condecoró

Y con un mural lo honran
junto a otros personajes
ahí en el Puente el Boquete
donde podrán admirarle

Hoy se ido para el cielo
a sanguear con papa Dios
y contarle sus andanzas
las que en la tierra vivió

Que se escuche un buen sangueo
pues don Víctor va a cantar
«Un ramillete de flores»
en su altar para San Juan

Que repiquen los tambores
con un golpe bien sabroso
y un aplauso pal´ maestro
el cultor Víctor hermoso

Se despidió de este plano
el cultor Víctor Hermoso
pero siempre su legado
se quedará con nosotros

Don Pío Lara




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