En Venezuela el hambre tiene voces. Telemundo 51, a través de un reportaje audiovisual que muestra dramáticos y exclusivos testimonios sobre la grave crisis alimentaria que vive el país, así lo demostró.
Luego de casi tres décadas del Caracazo, aquella revuelta popular en contra del Gobierno de Carlos Andrés Pérez por la corrupción, la miseria y el hambre; estas condiciones se han agudizado, ahora bajo el Gobierno de Nicolás Maduro.
Uno de los casos presentados en el trabajo de investigación es el de Jaqueline Naranjos, una madre que, además de lidiar a diario con el hambre, también tiene que batallar con la hidrocefalia de su hija de 20 años. No ha podido llevarla a las consultas médicas, ni mucho menos cumplir con el tratamiento, ya que no posee los recursos necesarios.
Hacen referencia también a la escalada de muertes de niños por desnutrición, que comenzó en la Guajira venezolana y en el estado Zulia. Jhan Marco, otro de los casos presentados, es uno de esos niños. Murió antes de cumplir los dos años de edad por falta de nutrientes en su organismo.
A pesar de que todas las imágenes fueron grabadas en una zona rural del estado Zulia, sirven de radiografía de la crisis que azota a todo el país. La Encuesta Condiciones de Vida 2016 (Encovi), elaborada por la USB, UCV y UCAB, junto a un grupo de ONG, reveló que al a 93,3% de los venezolanos no les alcanza el dinero para cubrir sus necesidades alimentarias.
Los resultados de la Encovi mostraron que la pobreza creció en Venezuela durante el último año: 81,2% de los hogares se encuentran en estado de carencia. Este número representa un aumento de 8,1% y 34,1% en relación con los resultados de 2015 y 2014, respectivamente. 74,3% de las personas entrevistadas manifestaron que, en promedio, perdieron 8,7kg en el último año.
En el país con las mayores reservas de petróleo, las madres se ven obligadas a elegir a cuál de sus hijos alimentar y cuál enviar a la escuela.
El reportaje está dividido en dos capítulos. Fue conducido por el periodista venezolano Fernando Girón y producido por el también periodista venezolano Alberto Rodríguez Palencia.
