Australia se adelantó 1-0 en su enfrentamiento de cuartos de final de la Copa Davis ante Países Bajos al ritmo que marcó el servicio de Jordan Thompson, que se impuso por 4-6, 7-5 y 6-3 al neerlandés Tallon Griekspoor, agotado al final tras dominar el set inicial y vaciarse en el intento vano de no perder el segundo.

En el estreno de la competición las gradas del Martín Carpena de Málaga se llenaron casi en su totalidad, con presencia de centenares de neerlandeses que fueron fieles en la riqueza y en la pobreza al número 96 del mundo. Una afición de diez que aplaudió igualmente al rival cuando sintió que lo merecía.

Intercambiaron roturas los dos jugadores para empezar, pero en los primeros compases se percibió a Griekspoor con más voluntad de atacar, dispuesto a sacar a pasear una derecha profunda que le dio mucho rédito.

La estrategia del neerlandés, aguantar el peloteo y aprovechar la primera ocasión para imprimir velocidad a su mejor golpe, quedó clara desde el comienzo.

Rompió en blanco para 3-2, beneficiado por los altibajos con el saque de Thompson, 84 de la ATP y al que nunca se había enfrentado. El set inicial cayó de lado del neerlandés en 43 minutos.

Con 3-3 en la segunda manga, se disputó el juego más apretado hasta entonces, con siete situaciones de igualdad y ventaja antes de que Thompson lograse conservar su servicio.

Entró el choque en su fase más cerrada, porque el australiano encontró su servicio -terminó el choque con 16 puntos directos- y a Griekspoor le costó cada vez más conservar el suyo. Con 6-5 y al resto, Thompson hizo buena su última oportunidad de evitar el juego de desempate y se garantizó la tercera manga.

En ella, el equilibrio aguantó hasta el 3-2, cuando el jugador de Sídney logró la rotura que sería definitiva. Se mostró físicamente más fresco que su contrario, que perdió en precisión y ganó en errores. Los derechazos que antes lamían las líneas empezaron a caer en terreno baldío. Luchador hasta el último momento, firmó en blanco su último saque antes de entregar a Australia el primer punto.

El primer partido de esta final a ocho de la Davis sirvió para conocer la espectacular escenografía de la competición, con una cuenta atrás para recibir a los equipos y unas banderas gigantes de cada país a cada lado de la cancha en la presentación de los jugadores.

El siguiente partido lo disputarán Alex de Miñaur (24 ATP) por Australia y Botic van de Zandschulp (35) por Países Bajos.

En caso de ser necesario el desempate, el partido de dobles lo disputarían los australianos Matthew Ebden y Max Purcel, vigentes campeones de Wimbledon, y los neerlandeses Wesley Koolhof y Matwe Middelkoop, aunque los capitanes pueden hacer cambios en el último momento.

EFE




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