La familia Pérez Cortez del barrio Bucaral II estaba destrozada este domingo, pues en la madrugada sujetos desconocidos mataron a tiros a dos de sus miembros.
Los cuerpos de Daniel Alfredo Pérez Cortez de 22 años y el de su hermano Pedro Javier Pérez Cortez, amanecieron tirados en la acera con varios impactos de bala. Los dos jóvenes estudiaban mecánica automotriz en el Instituto Universitario de Tecnología Industrial de El Trigal. También trabajaban con su padre haciendo transporte de carga.
De acuerdo a informaciones aportadas por familiares, Daniel Alfredo había salido a compartir con su novia en Paso Real, donde habían montado una miniteca en la calle. Al parecer, allí se presentó un problema por lo que decidió retirarse a su casa, a eso de las 4:30 de la madrugada.
Unos amigos le dieron la cola hasta una cuadra antes de su residencia, pero no se dio cuenta que lo venían persiguiendo. Llamó por teléfono a Pedro Javier, que estaba durmiendo, para que le abriera la puerta. Los sujetos que lo seguían, aparentemente unos cuatro, "comenzaron a disparar como locos".
El mayor de los hermanos empujó a su novia a un lado para que no la hirieran, e intentó meterse a su casa donde el menor ya le había abierto la puerta. Hasta allí llegaron sus atacantes y los mataron a los dos de múltiples disparos.
El papá de los muchachos observó desde el porche de la vivienda lo ocurrido. No quiso abrir la puerta porque escuchó muchos tiros y sintió miedo, pero jamás pensó que ese era el último día que vería a sus hijos con vida.
Esto ocurrió en la primera calle, frente a la vivienda número 22. Los vecinos estaban alarmados porque los delincuentes dispararon en forma indiscriminada hacia distintas partes, al punto de que mataron a un perrito que salió a ladrarles.
En la morgue algunos de los que estaban en la miniteca comentaron que los atacantes viajaban en un Corsel amarillo.
Daniel Alfredo Pérez Cortez dejó huérfanos a dos niños, uno de dos años y otro de nueve meses.
Parientes se quejaron de la inseguridad que reina en esta zona de la parroquia Rafael Urdaneta. Según señalaron el pasado martes mataron a otro de sus familiares para quitarle el carro. Se llamaba Ender Brito y tenía 36 años.