Las tormentas tropicales Lee y María continúan su ruta con dirección este en aguas abiertas del Atlántico, mientras siguen perdiendo fuerza y camino a su disipación, informó este viernes el Centro Nacional del Huracanes (NHC) de EE.UU.
En un boletín emitido a las 21.00 GMT, los expertos del NHC, con sede en Miami, indicaron que Lee, que a primeras horas de hoy era un huracán de categoría 1, se debilitó aun más en las últimas horas y tiene ahora vientos máximos sostenidos de 65 millas (100 kilómetros).
Este ciclón, que llegó a ser el quinto huracán de fuerza mayor de la temporada atlántica, aumentó la velocidad de su desplazamiento y se mueve a 36 millas por hora (57 km/h), hacia el noreste y se mantiene alejado de zonas habitadas.
Los meteorólogos pronostican que así seguirá hasta que se disipe este sábado.
María, que golpeó la pasada semana a la isla de Dominica como un huracán de categoría 5 en la escala Saffir-Simpson (la máxima) y Puerto Rico de categoría 4, donde dejó un saldó oficial de 16 víctimas mortales, para un total provisional de medio centenar, tiene hoy unos vientos de 60 millas por hora (95 km/h).
Al igual que Lee, esta tormenta tropical ha incrementado su velocidad y se desplaza a 31 millas por hora (50 km/h) con rumbo estenoreste, por lo que se prevé sus últimos efectos puedan llegar a notarse en Irlanda a inicios de la próxima semana tras cruzar el Atlántico.
María, que se encuentra a unas 570 millas (915 km) al sureste de Halifax (Canadá), podría degradarse a ciclón extratropical este sábado cuando esté ya en aguas del norte del océano Atlántico.
