Los empleados que laboran en la empresa Protinal han comenzado una protesta pacífica en las inmediaciones de la empresa para exigir que se les devuelvan sus derechos como empleados. Ivan Toro, secretario de reclamos de Protinal, planta de embutidos, ubicada en Valencia reclamó el hecho.
Toro afirmó que desde hace una semana no se les vende a los empleados los productos que la empresa ofrece y que forman parte de la gama de Embutidos El Corral, es decir, jamón, mortadela, salchichón, entre otros productos básicos.
Un incumplimiento en el contrato firmado llevó a cerca de 80 trabajadores a protestar ante esta injusticia, la cual no ha sido justificada y que goza de ilegalidad, debido a esta problemática las figuras importantes de la empresa han ignorado las quejas de sus empleados y han mantenido la medida, en especial el director nacional de recursos humanos, Sebastian Hergueta.
El trabajador relató como la empresa ha arremetido en diversas ocasiones contra los empleados, lo que para ellos se traduce en un acoso laboral por desenvolver el papel de sindicalistas dentro de una empresa en la que «nos cierran las puertas de los almacenes y de otras partes de la empresa para que unos trabajen y otros no, ademas en diciembre trabajamos los días de fiesta y sólo nos pagaron 1.000 bolívares» explicó el empleado de Protinal.
Al afirmar el pago dado en las fechas decembrinas, recalcó que su sueldo es de 35 mil bolívares, con los que trata de cubrir las necesidades de su hogar en el que viven su esposa y sus hijos, así como el, muchos más sufren las penurias y la indolencia de esta empresa.
Destacó que durante el año anterior se realizaron 6 convenciones en la que se reunieron miembros de la empresa con los trabajadores y en todas estas se hicieron los mismos planteamientos que no benefician de ninguna manera al trabajador.
Finalizó haciendo un llamado al ministro del trabajo Francisco Torrealba quien asumió el cargo hace tan sólo dos días y le pidió que se hiciera cargo del asunto y le recordó a este que a pesar de los vínculos entre Protinal y el Gobierno no había razón alguna para hacerse los ciegos sordos y mudos.
