Los trabajos de rescate en la fábrica de velas de la localidad de Mayfield (Kentucky) derrumbada por un tornado en la noche del viernes con unas 110 personas en su interior prosiguen este domingo con la llegada de la luz del día.
Solo 40 personas han sido rescatadas hasta ahora en esta fábrica, que trabajaba para poder atender la demanda de velas en estas fiestas navideñas cuando un poderoso tornado de categoría F3, de un máximo de 5 en la escala de Fujita, pasó por encima de la nave industrial dejando solo un amasijos de hierros.
El buen tiempo ayudará en estas tareas de rescate, y este domingo el pronóstico meteorológico anticipa un día soleado, pero en el que se mantendrán las bajas temperaturas, que pueden alcanzar un grado centígrado bajo cero.
Efe pudo comprobar anoche cómo decenas de bomberos y maquinaria pesada continuaban los trabajos de desescombro con temperaturas bajo cero y apoyados por potentes focos de luz.
Los trabajos de rescate prosiguen en Kentucky
En este lugar, más parecido a una zona de guerra y cerrada por soldados de la Guardia Nacional, personal de emergencia de toda la región se afanaba por retirar toneladas de metales para poder llegar adonde se confía pueda haber sobrevivientes.
El gobernador de Kentucky, Andy Beshear, reconoció que la lista probable de muertos en el estado sea de más de 70 personas, aunque esa cifra podría superar el centenar en los próximos días, cuando avancen los trabajos de búsqueda y rescate.
El presidente de EEUU, Joe Biden, declaró el estado de desastre federal para Kentucky y se espera que altos funcionarios de la Casa Blanca viajen en las próximas horas al estado para comprobar de primera mano los efectos del paso de los tornados.
Esta declaración supondrá la llegada de fondos y equipos federales a la región, a lo que hay que sumar la solidaridad de la ciudadanía, que han donado ya más de 825.000 dólares, según indicó este domingo el gobernador de Kentucky, que pidió más donaciones para ayudar a las familias afectadas.
Se teme que murieron decenas de personas
Pero esta región no fue la única afectada por la cadena de más de 30 tornados ocurrida en seis estados en la noche del viernes, en la que se teme que murieron decenas de personas.
El gobernador de Illinois, J.B. Pritzker, confirmó que al menos seis personas murieron en Edwardsville, donde el techo de un almacén del gigante del comercio electrónico Amazon se derrumbó poco después de que se reportase que un tornado había tocado tierra en la zona.
En Tennessee, las autoridades locales han informado de al menos cuatro personas muertas producto a una serie de presuntos tornados en el estado y un hogar de ancianos en Monette, en Arkansas, quedó destruido por un tornado con un saldo de al menos un muerto.
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