El gremio de transportistas urbanos de Caracas exigió, este viernes 26 de enero, un ajuste en el precio a dos mil bolívares, en un encuentro con las autoridades de Fontur.
El presidente del bloque Norte-Sur, Jhon Escalona, expresó que los ingresos que perciben los chóferes actualmente no alcanzan para costear los repuestos, aceite o cauchos.
Además explicó que, a pesar de estar más de un año en consultas con el gobierno, las promesas han sido insuficientes y no ha dado respuestas o soluciones que den tranquilidad al gremio.
Durante la reunión se discutió la posibilidad de que el gobierno promueva la reactivación de créditos bancarios a los conductores para cubrir las demandas de repuestos y renovación de vehículos.
Fontur incluyó la propuesta de ser agregados a los beneficios de misiones sociales y por los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP).