El Tribunal Superior Electoral de Brasil inició hoy la que debe ser la última audiencia del juicio sobre unas supuestas irregularidades en la campaña de Dilma Rousseff y Michel Temer en 2014, que sellará la suerte del actual mandatario.
En esta sesión, el instructor del caso, Herman Benjamin, concluirá la lectura de su informe, del que ya ha adelantado que pedirá la anulación de la victoria obtenida en las urnas por Rousseff y Temer hace tres años, lo que equivale a pedir la destitución del gobernante.
Luego se manifestarán los otros seis miembros de la corte, entre los cuales cuatro han expresado dudas sobre la validez del material probatorio presentado por la acusación.
"Creo que estamos llegando al final de este importante juicio", dijo el presidente de la corte, Gilmar Mendes, al abrir la sesión.
Temer heredó el poder el año pasado después de la destitución de Rousseff por la gestión irregular de los presupuestos y, aún con una sentencia condenatoria del tribunalelectoral, pudiera conservarlo hasta que se juzguen todas las apelaciones previstas para el caso.